LA HABANA, Cuba.- Ernesto Alfonso, un cubano de 54 años de edad, aún conserva la esperanza de que algún día las interminables colas para pagar una factura telefónica, así como los costos de las llamadas y la variabilidad de servicios no representen un problema, cuando en Cuba coexistan diferentes empresas de comunicación que ofrezcan servicios de calidad y se preocupen por la demanda de sus clientes.
Sin embargo, esto sólo representará una utopía mientras el Estado insista en mantener como proveedor exclusivo a su incompetente Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A. (ETECSA), caracterizada por severas críticas que constantemente recibe de la población debido a sus precios astronómicos, los engorrosos trámites, la ineficacia en los servicios o sus deficiencias tecnológicas.
ETECSA es la única compañía encargada de las telecomunicaciones en toda la Isla. En diciembre del 2003, mediante el Acuerdo 4 996 del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros y el Decreto 275, se amplió la concesión de esta empresa como operador unificado de telecomunicaciones, a través de la fusión de Cubacel y C-COM. El 4 de febrero de 2011, la Gaceta Oficial de la República de Cuba anunció que el régimen había adquirido el 100% de las acciones de la organización. De más está decir que desde entonces, nada ha sido mucho mejor.
Los problemas internos se hacen cada vez más frecuentes. Guillermo Ramos, un usuario concurrente a las oficinas comerciales de la compañía, comenta que las quejas e insatisfacciones de la población no pueden solucionarla los trabajadores que laboran directamente con el público y agrega que una de las causas de las demoras se debe al propio sistema informático interno de la compañía, muchas veces se encuentra caído y esto origina grandes demoras.
Servicios incompetentes
El pasado año se implementaron nuevos servicios y ofertas de la compañía, como transferencias de saldos entre celulares, rebaja de las tarifas de navegación nacional e internacional, implementación de un nuevo ciclo de vida de la línea del celular de hasta un año, cambios de propietarios entre estas líneas, así como la apertura de nuevas Redes Inalámbricas (Wifi-ETECSA) en varias zonas públicas del país.
Sobre los servicios telefónicos que ofrece la compañía, Alejandro Fuentes, un joven estudiante de medicina, comenta que la telefonía fija es muy buena, pero la móvil es desastrosa.
“Las llamadas son de muy mala calidad. A veces se crea un vacío en la comunicación y se escucha muy mal porque no en todos los lugares dentro de la misma ciudad tienen buena cobertura, algo que no entiendo aún. En días festivos como la Navidad es muy difícil realizar llamadas o enviar mensajes que lleguen a tiempo porque las líneas se congestionan”, agrega.
Algunos servicios que implementa la compañía en la telefonía fija son la llamada en espera, conferencia tripartita e identificador de llamadas.
Clientes como Yanaisa Hernández opinan que estos servicios son bastante buenos, pero aun así hay muchos hogares sin teléfono fijo dentro de la misma ciudad y no todas las personas pueden acceder a demás servicios como el identificador de llamadas, porque los precios siguen muy alejados de la realidad cubana.
En noviembre del año pasado la empresa tuvo serios problemas en los servicios a los clientes del correo Nauta, al igual que los usuarios de navegación por Internet. Por este motivo, la compañía realizó una recarga de dos horas a las cuentas de sus clientes, algo que no compensó los días que el servicio estuvo inhabilitado, lo que impidió que muchas familias quedaran incomunicadas durante ese tiempo.
Sin embargo, los problemas no terminaron allí. Desde horas tempranas del 7 de enero de este año se presentó inestabilidad en los mismos servicios. Pero en esta vez no se realizó ninguna indemnización por parte de la empresa, lo que originó mucha desconfianza entre de sus usuarios.
Los problemas de Nauta no terminan allí. Yanet Martínez, una joven que vive en la Villa Panamericana, al este de La Habana, tiene que desplazarse hasta la zona de 23 en el Vedado habanero para poder conectarse de manera segura y rápida.
“En mi zona sólo hay dos antenas y la conexión es súper lenta. Los dueños de las laptops que comparten su conexión con el programa Connectify se llevan toda la señal y no dejan a los demás conectarse. Y mejor ni hablar de la escasez de tarjetas de recargas. En ese lugar, los pocos que las venden, lo hacen por un precio más elevado, a tres CUC”, señala.
Precios alejados del salario real
En la actualidad existen 7 000 millones de líneas de teléfonos celulares en todo el mundo, un número que ya igualó al de seres humanos vivos.
En Hong Kong, China, la gente gasta como promedio apenas el 0,18% de su salario de cada mes por ese servicio, y en Dinamarca es el 0,19%.
Mientras que entre los más baratos de Latinoamérica, según un informe del Foro Económico Mundial, están Costa Rica, Guyana y Panamá con costos ajustados al poder de compra de la población local, de alrededor de 0,09, 0,12 y 0,22 dólares por minuto respectivamente.
El precio astronómico de las llamadas por celular en Cuba figuran entre las principales preocupaciones de los ciudadanos cubanos que viven de un sueldo promedio. Analizando el precio de las tarifas (0,35 CUC por minuto) con el poder de adquisición (20 CUC de promedio), el importe se puede considerar como uno de los más elevados de todo el mundo aunque este informe posiciona a la nación caribeña en el puesto 101, junto a Uruguay (sin tener en cuenta, lógicamente, el poder real de adquisición).
Un cubano de a pie solo puede utilizar las llamadas telefónicas por esta vía en casos de extrema urgencia, porque los salarios apenas soportan los 0,35 CUC que cuesta el minuto por el día o los 0,10 CUC a partir de las 11:00 p.m.
“Creo que son unos precios muy caros para la mala calidad del servicio. La telefonía móvil en Cuba en vez de ser una necesidad, es un lujo. En mi caso, si no fuera por el sacrificio de mis padres, nunca hubiese soñado con una línea de celular”, comenta Adrián Fundora, un joven estudiante de preuniversitario que depende del salario de sus progenitores.
En marzo del 2015 las llamadas originadas desde teléfonos fijos del sector residencial y teléfonos públicos, tuvieron una reducción de precio con un costo de 1,00 CUC el minuto a todos los destinos internacionales. Para el servicio de envío de SMS internacional, la tarifa se redujo hasta 0,60 CUC. Por celulares esta oferta también se sujetó a un valor de 1,10 CUC a América del Norte, América Central y América del Sur, excepto a Venezuela, que cuesta 10 centavos menos; mientras que al resto del mundo, las tarifas son de 1,20 CUC el minuto.
Sin embargo, aún la empresa no se ha pronunciado sobre una posible reducción de sus tarifas irrisorias para las llamadas nacionales en las tres millones 287 mil líneas móviles que existen en el país.
En una entrevista al sitio web oficialista cubasí.cu, la presidenta de ETECSA, Mayra Arevich, justificó muchas de estas cuestiones relacionadas con el desarrollo de la compañía y los altos precios: “Se necesita saber que el desarrollo de las telecomunicaciones en nuestro país marcha armónicamente con el desarrollo de la economía cubana. Las inversiones, los equipamientos, se pagan en moneda libremente convertible, y es necesario que la empresa pueda tener posibilidades de adquirir esa moneda para continuar brindando, dentro de nuestra misión, los servicios a la población que cobramos en moneda nacional como es la telefonía fija, que sigue siendo subsidiada”.
Sin embargo, algunas personas como Yoan Rivero, un cubano que vive de las remesas que les envían sus familiares, considera que las riquezas de ETECSA en los últimos tiempos se deben a los miles de cubanos en el exterior.
“Pena les debería dar que con toda la divisa que están generando gracias a nuestras familias en el exterior, no mejoren sus servicios”, afirma, antes de añadir que “el correo nauta es pésimo. Pero sobre el servicio de internet, a pesar de estar caro, da más resultado recargar tu cuenta a dos CUC y hablar dos horas por el Imo con algunos familiares, que llamar con 10 CUC a tus familiares desde un teléfono fijo por solo cinco minutos”.
Por otra parte Tania Velázquez Rodríguez, directora del departamento “Comercial y Mercadotecnia” de la empresa, para calmar las preocupaciones de sus clientes comentó recientemente en un artículo del periódico Granma: “Sabemos que la tarifa es una de las más altas del mundo. Sin embargo, se trata de un problema de capacidad y no de voluntad. No hacemos nada con bajar a 10 o 5 CUC el costo de activación, y que al tercer día de venta se acaben las capacidades de comercialización”, aclara la funcionaria.
Un futuro incierto
Desde inicios del año pasado esta empresa de telecomunicaciones ha realizado una apertura con diferentes compañías extranjeras.
El 20 de febrero se estableció una interconexión directa entre Estados Unidos y Cuba, inicialmente para el servicio de llamadas internacionales de voz, amparado en el acuerdo de servicios suscrito entre ETECSA y la compañía norteamericana IDT Domestic Telecom, Inc. (IDT).
Otro acuerdo importante fue el firmado con la compañía Sprint en la Feria Internacional de La Habana, lo que facilita a los clientes de dicha corporación americana realizar y recibir llamadas hacia la Isla, así como enviar mensajes de textos a través de sus teléfonos móviles. Fue considerado como el primer convenio para el servicio de roaming de forma directa, rubricado entre ambas naciones.
La china Huawei Technologies Co. Ltd (HUAWEI) también suscribió un acuerdo para la comercialización de teléfonos móviles, piezas y accesorios.
Una nota publicada recientemente por el oficialista Cubadebate, indica que también esta última empresa, junto a ETECSA, realizará pruebas pilotos en dos consejos populares de La Habana Vieja para llevar Internet junto con sus enigmáticos precios a los hogares cubanos.
No obstante, los inconvenientes podrían continuar y los costes seguirían siendo uno de los más elevados de Latinoamérica, hasta que este monopolio dirigido por el gobierno cubano no tenga una competencia real con otras compañías que puedan operar en la Isla. Pero, ¿al régimen le convendrá mover las fichas cuando una parte de sus riquezas provienen de los multimillonarios beneficios de la única empresa de telecomunicaciones en la nación caribeña?
Mientras tanto, hombres como Ernesto Alfonso seguirán soñando en un futuro próspero para el pueblo cubano, que añora hablar por celular sin tener que contar los segundos de la llamada; y tener una Internet, sin restricciones, con precios asequibles, junto a otros servicios de comunicación más diversificados según la necesidad real de los clientes nacionales.