PEKIN, China, 4 de julio (Agencias, 173.203.82.38) – El gobernante cubano Raúl Castro inició el miércoles una visita oficial a China, la primera que lleva a cabo al gigante asiático como máximo mandatario cubano, en la que se reunirá con los presentes y futuros líderes de ese país en busca de apoyo para llevar a cabo sus reformas en isla.
Un reporte de la agencia Efe indica que Castro llegó acompañado del vicepresidente del Consejo de Ministros, Ricardo Cabrisas -quien ya viajó a Pekín en diciembre de 2011- y el ministro de Asuntos Exteriores, Bruno Rodríguez, e iniciará su agenda de reuniones el jueves con un encuentro con el presidente chino, Hu Jintao, y otro con el presidente del Legislativo, Wu Bangguo.
El viernes es un día clave en la gira, dijo Efe ya que, además de encontrarse con el primer ministro chino, Wen Jiabao, celebrará una reunión con el vicepresidente Xi Jinping (llamado a ocupar la presidencia en 2013) y con el viceprimer ministro Li Keqiang, principal candidato a suceder a Wen el próximo año.
Durante estos encuentros, Castro conocerá al futuro liderazgo del régimen chino y se firmarán varios acuerdos de cooperación cuyo contenido aún no se ha revelado, aunque se esperan pactos en sectores como la agricultura, la energía o el turismo.
Se trata del primer viaje a China del líder cubano desde que en 2006 relevara a su hermano Fidel al frente del régimen que gobierna la nación caribeña desde 1959.
En la primera parte de la gira asiática Pekín posiblemente ofrecerá inversiones en territorio cubano, que se sumarían a las que ya tiene en sectores de la isla tales como el transporte o la industria petrolera, indicó Efe.
El viaje de Castro se produce en un momento de cambios para Cuba, cuyo régimen aprobó en 2011 el plan de reformas económicas, que implica, entre otras cosas, una tímida apertura a la iniciativa privada y una reducción de la abultada nómina estatal de la isla.
En la visita, de marcado tono económico y comercial, se espera también que ambas partes analicen formas de ampliar los intercambios bilaterales, pese al rápido crecimiento que éstos han experimentado ya en los últimos años (de 590 millones de dólares en 2004 a 1,810 millones en 2010).