LA HABANA, Cuba, 16 de mayo (Carlos Ríos Otero, 173.203.82.38)- La crisis del transporte y los apagones cada vez más frecuentes han desatado rumores de que el gobierno cubano ahorra combustible ante los temores de que la muerte del presidente venezolano Hugo Chávez afecte el suministro de petróleo a la isla.
La Revista de la Mañana, el programa informativo matutino del canal Tele-Rebelde, trasmitió recientemente un reportaje donde se aseguraba que en la provincia Sancti Spíritus, luego de ser reparados los ómnibus del transporte público, se disponía del 70 por ciento de los vehículos, pero un 30 por ciento de ellos no se aprovechaban por falta de combustible.
En las últimas semanas, la falta de ómnibus en La Habana provoca aglomeraciones en las paradas. Según informan chóferes, a los administradores de los paraderos (estaciones) de la capital le han asignado una cuota restringida de combustible, lo que hace que muchos de los autobuses no presten servicios.
Sin embargo, durante la visita a Cuba del Papa Benedicto XVI a la isla a finales de marzo pasado, el servicio de transporte público mejoró considerablemente, una recuperación que obligó a los cubanos a concluir que, si el combustible “aparece” y “desaparece” en dependencia de los eventos que ocurren en el país, debe estar guardado en algún lugar.
Por otra parte, desde el sábado 31 de marzo se instauró la hora de verano para aprovechar la luz solar y disminuir los apagones. Pero los apagones en toda la isla no han cesado en lo que va de mayo, incluso en La Habana.
Tales eventos han desatado rumores de que el estado de salud de Hugo Chávez, y la posibilidad de que pueda perder las elecciones presidenciales del próximo 7 octubre, están obligando al gobierno cubano a acumular combustible por temor a que, al perder el petróleo que viene de Venezuela, aumente el descontento popular y se puedan desencadenar protestas como El Maleconazo de 1994.