LA HABANA, Cuba, 1 de septiembre (Agencias, 173.203.82.38) – Aunque algunos prefieran mantener el asunto en la alcoba, el diario Juventud Rebelde decidió no darle la espalda al tema del coito anal en un artículo que publicó el pasado 24 de agosto en su sección Sexo Sentido.
En la escrito titulado “Coito anal, entre la fantasía y el estigma”, que trató sobre los tabúes persistentes entre los cubanos sobre el sexo anal, el órgano de la Unión de Jóvenes Comunistas ofreció detalladas recomendaciones a los lectores de cómo proceder, las precauciones necesarias para evitar traumas físicos y sicológicos, y los “aliados” perfectos a la hora de practicarlo, informó el sitio Café Fuerte.
Según la autora Mileyda Menéndez Dávila, en encuentros del diario con centenares de jóvenes de todo el país han aflorado los tabúes que se mantienen respecto al sexo anal, a lo que se suma el desconocimiento sobre los métodos adecuados por quienes no se atreven a preguntar en sus familias.
“El principal temor de las chicas es que la penetración resulte dolorosa: así lo escucharon de mujeres mayores o lo han probado en sí mismas, pero confiesan sentir curiosidad”, indica el texto. “Los varones dicen estar muy motivados (también alentados por adultos), pero se quejan de que no logran convencer a sus parejas o no se sienten capaces de practicarlo bien”, escribió Menéndez Dávila.
Agrega que adultos de ambos sexos piden información porque quisieran complacer fantasías propias o de sus parejas sin limitaciones fisiológicas o culturales.
“Incluso parejas de muchos años se animan hoy a explorar ese camino para oxigenar su erotismo y recuperar el interés mutuo, pero no tienen idea de por dónde empezar”, relata la periodista.
Para iniciarse en el coito anal, Juventud Rebelde recomienda el uso de cualquier preservativo “siempre que esté en fecha y se vea bien lubricado”, aunque recuerda que “existen lubricantes a base de agua que pueden aplicarse sobre el condón, los dedos y el ano como parte del necesario preámbulo para estimular el deseo y relajar los esfínteres o músculos que cierran el recto”. Sin embargo, el diario especifica que ese tipo de lubricante aún no se vende en Cuba.
Y concluye con un llamado a la preparación física y mental para la experiencia.
“Como todas (las formas) han sido estigmatizadas culturalmente durante muchas generaciones, deben prepararse muy bien espíritus y cuerpos para que la experiencia resulte positiva y les proporcione orgasmos intensos, y eso incluye también el contar con la discreción de los participantes”, asegura la columnista de acuerdo con la reseña de Café Fuerte.