LA HABANA, Cuba, 31 de julio de 2013, Dania Virgen García/ www.cubanet.org.- Desde hace varios días, el activista Félix Pérez Gamboa, quien se encuentra en el destacamento 11, se halla pidiendo asistencia médica, debido que sufre diferentes dolores en las articulaciones clavicular-humeral derecha, agudizándose el dolor cada día, informa desde la prisión Kilo 7 el preso Enrique Bartolomé Camabara Díaz.
Al negársele la asistencia médica a Pérez Gamboa, y en represalias a las informaciones que facilita a la prensa independiente, ha tenido que pedirles a varios reclusos algunos calmantes como la dipirona, y una grasa que utiliza para calmar el dolor.
Por otra parte, Israel Rodríguez Ramírez está en una de las celdas de castigo, en huelga de hambre desde el día 15 de julio, debido a que la fiscalía provincial solicita seis años de privación de libertad, por un robo que según él no ha cometido. A raíz de negarse a ingerir alimentos y agua, fue remitido con carácter retroactivo al hospital de la prisión.
Anteriormente, este reo realizó una huelga de hambre de 36 días. Oficiales de la policía política, para que levantara la huelga, le dijeron que la víctima había reconocido que él no era quien había cometido el delito, por lo que ya no tenía ningún sentido seguir negándose a ingerir alimento. El reo les creyó y levantó la huelga.
Lo sorprendente a este hecho es que el reo ya está siendo vigilado por un oficial de la PNR, de la ciudad de Esmeralda, que no es pariente, pues dicho militar ha usurpado la vivienda que es propiedad del recluso.
El reo Asnier Rivero Agosto, de 24 años de edad, hace unos días permaneció en la celda de castigo, con la boca amarrada con alambre, en huelga de hambre, y trató de suicidarse por ahorcamiento. Fue remitido al hospital de la prisión de régimen especial, la 26.
Todo esto lo llevó a cabo porque la dirección del centro penitenciario lo separó definitivamente del trabajo que desempeñaba voluntariamente en la cocina del penal.
Esta separación, según el recluso, fue porque el reo Ariel Pantoja, quien trabaja como jefe de la cocina y tiene tanta potestad como los jefes de la prisión, intentó violarlo.
No es la primera vez que el preso Pantoja actúa de esta forma, sin que las autoridades del penal tomen medidas al respecto.
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