LA HABANA, Cuba, 11 de junio (Agencias, 173.203.82.38) – El Consejo de Laicos de la Arquidiócesis de La Habana expresó su rechazo a “los ataques que en los últimos meses, de modo peyorativo y continuo”, se han dirigido contra el cardenal Jaime Ortega, arzobispo de La Habana.
En un comunicado divulgado el domingo en La Habana, el Consejo de Laicos dijo querer “dejar constancia del dolor” que le “causan tales ataques”, en razón de su “profundo cariño por el cardenal Ortega” y de su “amor por la Iglesia, a la que también se dirigen esas ofensas”.
El Consejo de Laicos recuerda que cuando el Gobierno cubano pidió hace dos años la mediación de la Iglesia, Ortega se reunió con ellos para explicarles “las características de las relaciones Iglesia-Estado, que en ese momento adquirían nuevos rasgos”.
“En aquella reunión se percibieron de manera clara las motivaciones de amor a la Iglesia y a Cuba que inspiraban esta actuación eclesial”, pero además “en todos los momentos posteriores a aquella reunión de junio de 2010, y hasta el presente, la participación del cardenal en este diálogo ha traslucido de modo evidente su amor a la Patria y a la Iglesia”, según indica el comunicado.
Las mediaciones de Ortega “siempre se han encaminado a procurar el progreso de las libertades individuales, sociales y religiosas en Cuba, así como a promover los valores espirituales y morales de la nación”, pero “esto sólo podrá lograrse eficazmente mediante el diálogo, la concertación y el consenso, y nunca mediante el antagonismo tanto dentro como fuera de la Iglesia”, subraya el Consejo de Laicos.
La nota de los laicos destaca que el cardenal Ortega ha sido “voz, no sólo en este último tiempo, sino durante los 33 años de su episcopado, de muchos que han acudido a él en busca de ayuda y comprensión”.
Durante una conferencia en abril pasado en la Universidad de Harvard, Estados Unidos, Ortega calificó de “delincuentes” a 13 opositores que ocuparon una iglesia de La Habana pocos días antes del arribo del papa Benedicto XVI a Cuba.
El cardenal dijo que los ocupantes eran “todos antiguos delincuentes”, “sin nivel cultural” y que algunos tenían “trastornos sicológicos”. También afirmó que la acción fue coordinada desde Miami. Más tarde dijo que sus pronunciamientos habían sido sacados de contexto.
(Grabación de los comentarios del cardenal Ortega sobre el incidente en la Iglesia de Nuestra Señora de la Caridad en marzo pasado) ortega-harvard
Las palabras de Ortega causaron indignación dentro y fuera de la isla, una reacción que ha sido presentada por las autoridades cubanas y publicaciones de laicos en la isla como una “manipulación” proveniente de los enemigos de la Iglesia y la revolución.
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