LA HABANA, Cuba, martes 20 de noviembre de 2012, 173.203.82.38.- Todos los sábados en la mañana, desde hace cinco años, un grupo de periodistas hacen el camino desde distintos puntos de la ciudad para concentrarse en un pequeño apartamento del popular barrio de Lawton. Versión insular de La Meca musulmana, los comunicadores se reúnen para entregar sus trabajos semanales y tertuliar sobre temas de actualidad de Cuba o el mundo, culturales o deportivos, de cine o televisión, y un largo etcétera temático.
La cita es en el pequeño apartamento donde vive del Licenciado Juan González Febles con su esposa Ana Torriciella. Una salita, un cuarto, un baño y una pequeña cocina es todo el espacio donde funciona la redacción del semanario Primavera Digital, uno de los esfuerzos más importantes de la sociedad civil cubana junto a la solidaridad internacional, para promover los cambios democráticos en la sociedad cubana. Este 22 de noviembre cumple cinco años de publicar información para Cuba y el mundo.
El espíritu de la Primavera Negra, y la represión sobre los demócratas cubanos por el gobierno militar, están en su esencia, pues para muchos analistas, la ola represiva de marzo del 2003, que se saldo con 75 presos políticos hoy ya en libertad o en el destierro, se centró en descabezar el periodismo libre que se fortalecía junto con el Proyecto Varela, La Mesa de Reflexión de la Oposición Moderada (MROM) y otros proyectos alternativos, el largo camino de la restauración democrática.
Según la leyenda, un par de extranjeros llegaron a La Habana en el 2007 y consultaron a la sociedad civil, para preguntar con quiénes se podría armar una pieza articuladora de información veraz y objetiva sobre la realidad insular, toda vez que los medios internacionales radicados en Cuba (CNN, AP, AFP, BBC, EFE) solo informan lo autorizado por el gobierno militar y los medios oficiales (Granma, Juventud Rebelde, Cubadebate) tampoco le hacen el favor a la verdad.
Los internacionalistas nórdicos( esa es su procedencia), conocían las amplias posibilidades de los informadores independientes, su preparación profesional, valor a toda prueba y equilibradas valoraciones. Un segmento profesional que incluye a mujeres y hombres, negros y blancos, jóvenes y viejos, habaneros y provincianos. La prueba del trabajo realizado estaba en los medios ya establecidos en aquel momento (Cubanet, Cubaencuentro, Misceláneas de Cuba, Disidente y varias publicaciones más, con base en el exterior, fundamentalmente en Estados Unidos de América, España y Suecia).
Además, reunieron información sobre la Asociación Pro Libertad de Prensa (A.P.L.P.), especie de gremio de los periodistas libres, que organizó tempranamente José Antonio Fornaris, para crear una “masa crítica” que convirtiera en realidad el proyecto de crear un medio de información que se realizara por completo desde la isla. Fornaris es un periodista de carrera que desde finales de la década del 80 hizo compromiso con la verdad y abandonó el periodismo oficial.
González Febles, José Antonio Fornaris, Luis Cino, Rogelio Fabio Hurtado, Ana Torriciella, Odelín Alfonso y otros amigos conformaron el grupo inicial de Primavera Digital en su primera edición, a ellos se unieron desde el exterior Víctor Olmedo y Cayetana Muriel, un chileno y una española residentes en Suecia interesados en el tema Cuba, y miembros de la democracia cristiana.
Al pensarse y aplicarse el proyecto de un medio de información alternativo e independiente dentro de la isla y fuera del paraguas de la iglesia católica, que ya contaba con la prestigiosa revista Vitral, dirigida por el laico Dagoberto Valdés, hay que pensar en el papel de las nuevas tecnologías y el uso de internet.
En el 2007, las llamadas nuevas tecnologías de la información se estabilizaban en el país para la sociedad civil, con ayuda de los gobiernos de Estados Unidos de América, Holanda, Suecia, Chequia y Noruega. Esos países (Noruega abandonó posteriormente cualquier comunicación con las fuerzas prodemocráticas), sostienen pequeños centros de promoción del ciberespacio, donde la mayoría de la sociedad civil recibe algún nivel de entrenamiento y sirvió para evadir el bloqueo que la dictadura aplica al uso de la internet.
Los entrenamientos para perfeccionar la labor, más el trabajo de equipo realizado por Primavera.., como se conoce en los medios prodemocráticos el semanario, dio como resultado que la primera pequeña plantilla se ampliara con colaboradores, así como fuentes en las distintas provincias y territorios del país y los intelectuales y blogueros pusieran su firma en algún artículo aparecido en el semanario, que en este momento corre el número 246. Yoani Sánchez, Víctor Domínguez, Orlando Luis Pardo, Wilfredo Vallín, Jorge Olivera y Manuel Cuesta aparecen entre las prestigiosas firmas que enriquecen el semanario.
Primavera… cubre en su versión diaria y semanal el periodismo informativo, el reflexivo y el especializado, creando un balance capaz de dar una imagen más amplia de la compleja realidad insular.
Al cumplir cinco años de trabajo, se perfila como el primer periódico de la transición dentro de la isla.
aleagapesant@yahoo.es