El domingo 13 de julio del 2014 se cumplen veinte años del hundimiento del remolcador 13 de Marzo en las aguas al frente de la Habana, que dejó un saldo de treinta y siete muertos y treinta y un sobrevivientes. En el año 1994 las tensiones derivadas de cinco años de hambre y necesidades elementales llegaron al límite.
Los cubanos se lanzaban desesperados al mar tratando de llegar a las costas de Estados Unidos, como si el solo hecho de flotar sobre algo garantizara el cruce de una distancia que para muchos fue interminable. Cualquier embarcación era usada con ese propósito. Numerosos barcos fueron secuestrados por personas que aspiraban a llegar, con sus familias, en condiciones más seguras que las propiciadas por cámaras de camiones, tanques de cincuenta y cinco galones y corchos. Las imágenes de aquellos días espantan y no es por estar orgullosos de ellas, que el castrismo las ignora absolutamente. Fue en esas condiciones que un grupo de familias planearon escapar de Cuba en el remolcador 13 de Marzo.
Los sobrevivientes de aquél trágico suceso están seguros de que el gobierno cubano tenía información del plan por la disposición alerta que tenían una serie de embarcaciones en las afueras de la bahía. Más tarde sabrían que también lanchas de la marina de guerra se mantenían al acecho, pero en un primer momento sólo alcanzaron a ver los barcos que, con potentes chorros de agua salada, rápidas maniobras y golpes incesantes al casco del 13 de Marzo, dificultaron su avance y produjeron su hundimiento. De nada valieron las súplicas de las familias amontonadas en el barco que, aspirando a detener el acoso, hicieron salir a cubierta a los niños que llevaban, a quienes debieron llevar nuevamente al interior de la embarcación, de donde no saldrían nunca más.
Después de hundido el 13 de Marzo, los chorros de agua continuaron contra, lo que incrementó el número de víctimas. En un momento dado, el acoso sobre los sobrevivientes cesó y una lancha de guardafronteras apareció en el lugar. Fueron los militares de esta embarcación, y no los miembros de los barcos acosadores, los que rescataron del agua a aquellos que aún quedaban con vida. Al subir al barco pudieron ver un buque de nacionalidad griega y comprendieron que habían sido rescatados para evitar que su tripulación fuera testigo de un crimen atroz.
Treinta y siete personas murieron en aquellos sucesos. Sus nombres son:
1- Hellen Martínez Enríquez, de cinco meses de vida.
2- Cindy Rodríguez Fernández, dos años
3- Ángel René Abreu Ruiz, tres años
4- José Carlos Nicole Anaya, tres años
5- Giselle Borges Álvarez, 4 años
6- Caridad Ley va Tacoronte, 5 años
7- Juan Mario Gutiérrez García, 10 años
8- Yasser Perodín Almanza, 11 años
9- Yousell (En otro escrito aparece Yaucel) Eugenio Pérez Tacoronte, 11 años
10- Eliecer Suárez Plasencia, 12 años
11- Mayulis Menéndez (Aparece Mendez en otro escrito) Tacoronte, 17 años
12- Miladys Sanabria Cabrera, 19 años
13 – Joel García Suárez, 20 años
14- Odalys Muñoz García, 21 años
15- Yaltamira Anaya Carrasco, 22 años
16- Yuliana Enríquez Carrazana, 22 años
17- Lissett María Alvarez Guerra, 24 años
18- Jorge (También aparece como José) Gregorio Balmaseda Castillo, 24 años
19- Ernesto Alfonso Loureiro, 25 años
20- María Miralis Fernández Rodríguez, 27 años
21- Jorge Arquímedes Levrígio Flores, 28 años
22- Leonardo Notario Góngora, 28 años
23- Pilar Almanza Romero, 31 años
24- Rigoberto Feu González, 31 años
25- Omar Rodríguez Suárez, 33 años
26- Lázaro Enrique Borges Briel, 34 años
27- Martha Caridad Tacoronte Vega, 35 años
28- Julia Caridad Ruiz Blanco, 35 años
29- Eduardo Suárez Esquivel, 38 años
30- Martha M. Carrasco Sanabria, 45 años
31- Augusto Guillermo Guerra Martínez 45 años
32- Rosa María Alcalde Puig, 47 años
33- Estrella Suárez Esquivel, 48 años
34- Reynaldo Joaquín Marrero Álamo, 48 años
35- Amado González Raíces 50 años
36- Fidencio Ramel Prieto Hernández 51 años
37- Manuel Sánchez Callol 50 años
Aún hoy el gobierno cubano no ha explicado la escala de valores por la que se rige para determinar que decenas de personas murieran de un modo tan bárbaro y sus ejecutores no hayan sido juzgados. Como el próximo trece de julio se cumplen veinte años del evento, miembros de la oposición democrática cubana solicitamos lo siguiente:
Primero: Que los días 12, 13 y 14 de julio del 2014 sean considerados de duelo por los cubanos en todo el mundo en honor a las víctimas del hundimiento del remolcador 13 de marzo.
Segundo: Que los artistas cubanos, funcionarios oficiales, miembros de instituciones represivas, intelectuales de cualquier orden, convocados usualmente por el gobierno cubano para encubrir con actividades festivas jornadas de dolorosa recordación para el pueblo de Cuba, se abstengan respetuosamente de participar en ellas, permitiendo que en estos días, como sucede en otras fechas semejantes, los cubanos vivamos nuestro dolor sin ofensas ni humillación
Los interesados en suscribir esta declaración pueden enviar su nombre a porvictimas13dmarzo@gmail.com
La Habana 9 de julio de 2014
Firmantes iniciales de esta Declaración
Julio Antonio Aleaga Pesant
Juan A. Madrazo Luna
Fernando Edgardo Palacio Mogar
Boris González Arenas
Manuel Cuesta Morúa
Eroisis González Suárez
Lilianne Ruiz Andarcio
Leonardo Calvo Cárdenas
Félix Navarro Rodríguez
Iván Hernández Carrillo
Mario Félix Lleonart
Yoaxis Marcheco Suárez
José Díaz Silva
Hugo Damián Prieto Blanco
Andrés Pérez Suarez
Lourdes Esquivel Vieyto