LA HABANA, Cuba. -Los niños del Círculo Infantil Alegres Cubanitos, ubicado en la calle Compostela esquina a Merced, en el centro histórico de la Habana Vieja, corren el peligro de contraer enfermedades infecciosas, provocadas por la acumulación de un basurero de grandes proporciones en la calle Merced, colindante al edificio que alberga a los pequeños.
Este reportero pudo constatar en el día de hoy que el vertedero, que también amenaza la salud de los habitantes del lugar, continúa sin ser retirado. Ni las autoridades de Salud Pública, Educación, ni Servicios Comunales o en su defecto, el Consejo de la Administración Municipal, máxima autoridad del gobierno en el municipio, se han pronunciado o tomado acción alguna al respecto.
No es un secreto que las instancias del gobierno local, ya sea el gobierno municipal o la Oficina del Historiador de la Ciudad dirigida por el Dr. Eusebio Leal Spengler, destinan incontables recursos para remodelación de muchos edificios del Centro Histórico de la Habana Vieja, en su condición de Patrimonio de la Humanidad.
A pesar de ello, este círculo infantil, al estar aislado de centros de interés turístico, no sólo se encuentra desatendido por las autoridades sanitarias responsables de mantener la limpieza del lugar, sino que tampoco se ha visto beneficiado por tal política de subsidios para la restauración de edificios históricos. La fachada del mismo demuestra el poco o ningún cuidado que reciben muchos de estos establecimientos por parte del Ministerio de Educación, establecimientos encargados de brindar una educación sana y provechosa para los futuros hombres y mujeres del país.
Cabe recordar que en los últimos 2 años la población cubana ha venido sufriendo la presencia de enfermedades contagiosas, algunas de ellas mortales, como el cólera, el dengue o la más reciente, chikungunya. La principal causa de estas enfermedades es la alarmante falta de higiene debido a la incompetencia del régimen para solucionar el deterioro acelerado de las condiciones de vida del cubano.