|
     
|
Julio 19, 2006 Con tierra y semilla bastaMarilyn Díaz Fernández, Lux InfoPress CAMAGUEY, Cuba - Julio (www.cubanet.org) - Los cristianos tenemos fe en que Dios no desampara a sus hijos. En eso pensé el pasado 12 de julio, cuando al pasar frente al local que ocupaba el mercado agropecuario de Sibanicú, ubicado en la calle William Soler, vi que en uno de los mostradores de los kioscos habilitados para la venta, crece y se enreda una frondosa mata de calabaza. Majestuosa, extiende sus guías en todas direcciones, nacida allí como si fuera obra divina. El hecho es que el mercado agropecuario municipal, el pasado diciembre, fue víctima de una medida gubernamental que lo trasladó desde una céntrica y concurrida esquina hasta un rincón en una calle de las afueras del pueblo. La medida incluyó la eliminación de los llamados intermediarios, así como la persecución de otros productores y vendedores furtivos, que no sólo ganaban su sustento, sino que ayudaban en gran medida a paliar las necesidades de alimentos de la población. Mientras tanto, los kioscos ubicados en el nuevo local del mercado agropecuario expenden algunos productos, pero la escasez de éstos y la poca afluencia de público, convierten en nula la rentabilidad, debido también a los salarios que se paga a los trabajadores que allí laboran. Lo negativo del balance económico y la falta de proveedores convierten al mercado en un desierto, acabando así la historia de este tipo de establecimientos, nacidos con el período especial. Ahora, los habitantes de Sibanicú compran y venden a escondidas las viandas, los vegetales y otros alimentos, actividad perseguida por las autoridades, que decomisan mercancías e imponen multas elevadas a los que practican el libre intercambio comercial. Sin embargo, el Partido Comunista de Cuba y el gobierno del territorio anunciaron que garantizarían, mediante ferias agropecuarias semanales, los abastecimientos necesarios a la población. Después de siete meses, los ciudadanos continúan esperando que la promesa se cumpla, en medio de más carencias y necesidades. Actualmente, el gobierno vende los productos cárnicos a precios elevadísimos, por encima de los fijados por los vendedores particulares; y a pesar de esos precios, la incapacidad para mantener la oferta se hace evidente a diario. Creo que la mata de calabaza que nació y crece por obra divina sobre el frío mostrador de hierro del desaparecido mercado es un desafío a los responsables de la desaparición de aquel establecimiento. Una manera de decirles que su incapacidad debía abochornarlos, porque hay cosas que para producirlas no necesitan de grandes inversiones, sino sólo un poco de tierra y semillas. LUX INFO-PRESS CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores y autoriza la reproducción de este material informativo, siempre que se le reconozca como fuente. | |
SECCIONES EN CUBANET ...... NOTICIAS
...... Prensa Independiente | Prensa
Internacional | Prensa Gubernamental
...... |