www.cubanet.org
CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como fuente y su autor.
 

La paja en el ojo ajeno

Laritza Diversent

LA HABANA, Cuba, mayo (www.cubanet.org) - Los miembros de la Unión de Periodistas y Escritores de Cuba (UPEC) son envidiosos. Ahora tienen la orientación de desprestigiar a los que no consideran “periodistas, ni independientes”. ¿Acaso ellos lo son?  

Para liberarnos de toda duda, entonces informen a nuestro pueblo qué errores cometieron Carlos Lage y Felipe Pérez Roque, y  que ellos mismos reconocieron en sus cartas de renuncia publicadas en los medios oficiales. Los cubanos queremos saber, además, en qué forma están respondiendo. 

Como mismos publicaron sus biografías como diputados nacionales, y exhortaron a la población a que ejercieran el voto unido en defensa de la “democracia socialista”, expliquen cómo la “miel del poder” despertó, en dos representantes del pueblo “ambiciones que los condujeron a un papel indigno”.  

Para ellos, trasmitir la realidad es guardar silencio sobre los problemas que golpean día a día a los cubanos. Y no porque no los sepan, son parte del sistema y también los sufren. Pero el temor a perder el puesto de trabajo y los viajecitos al extranjero los obliga a ver sólo las virtudes y valores de las obras de la revolución cubana. 

Si me equivoco, demuéstrenlo. Publiquen en Granma, divulguen por los noticieros de radio y televisión un trabajo que cuestione la actuación del Consejo de Estado cuando hizo destituciones y designaciones que, según la Constitución no le correspondían. Léanse el articulo 75 inciso ll) y o)  de la Constitución de la República y tendrán una fuente legal. 

Propaganda es echarle la culpa de nuestros males al “genocida bloqueo”. Esa sí es un arma de guerra psicológica que somete a los cubanos a un régimen que viola sus derechos civiles y políticos. Derechos que tienen porque son seres humanos, no una conquista del “sistema socialista”. 

¿Cuál de los periodistas oficiales es capaz de responsabilizar a la dirigencia histórica por la muerte de miles de cubanos en el mar? Si, la Ley de Ajuste Cubano incita a lanzarse, pero son las disposiciones gubernamentales las que los obliga a emigrar ilegalmente.  
¿Es culpa del “bloqueo” que en 1961 el entonces Presidente del Consejo de Ministros, Fidel Castro, haya restringido, por medio de la Ley 989 el derecho de entrada y salida al país de los ciudadanos cubanos?  

¿Qué periodista del sistema informativo del gobierno se atrevió, o se atreve, a decir que la referida ley viola uno de los preceptos de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que Cuba firmo en 1948  y se comprometió a cumplir?

¿Cuál de ellos calificó de injusta aquella ley porque nacionaliza por medio de la confiscación, sin derecho a indemnización, los bienes de los emigrantes cubanos? ¿Cuál la declaró inconstitucional porque se oponía a lo preceptuado en la ley fundamental de 1959, que en su articulado prohibía la confiscación? 

Ahora sí estamos en condiciones de preguntar quiénes trabajan para perpetuar  una política criminal contra su país.  ¿Quién atenta contra su patria? En vez de mirar la paja en el ojo ajeno, la prensa independiente de Cuba los exhorta a ejercer con profesionalidad y dignidad el oficio de periodista.