LA HABANA, Cuba, 9 de septiembre (Juan Carlos Linares / www.cubanet.org) – Gerardo Lazcano, presidente del Partido Neo-Católico, informó a este reportero que el preso común Nogel Luis Pérez, murió el 4 de septiembre en la cárcel de Agüica, en la provincia de Matanzas, se supone que de un infarto fulminante.

“Mientras sus compañeros sonaban los candados contra las rejas y pedían auxilio solicitando la presencia de los carceleros en el cubículo 5, un prisionero conocido como Alain daba respiración boca a boca a Pérez” –dijo Lazcano.

Cuando llegaron los guardias, tonfas en mano, pensando que había una revuelta, sacaron al moribundo del cubículo y lo llevaron a la enfermería, donde murió, después de esperar veinte minutos porque la prisión no contaba en ese momento con ningún transporte para llevarlo al hospital.

Lazcano se encontraba en la prisión entregando una jaba con comida al miembro de su partido, Augusto Guerra, prisionero político. “Lo dejaron morir a Nogel” -así se expresó Lazcano sobre el trágico suceso.