SANTA CLARA, Cuba, 6 de mayo (Yoel Espinosa / www.cubanet.org) - Alejandro Gálvez, retrasado mental y discapacitado físico motor, no recibe ninguna atención del gobierno en el municipio Santo Domingo, donde vive, a pesar de los reclamos de la madre.

“La casa que tenía en el poblado Jiquiabo se derrumbó, por eso vinimos para acá. La representante del gobierno, Marta Mena, y la trabajadora social, Yudelkis, prometieron ayudarme, pero lo que hicieron fue quitarme la pensión de 215 pesos que mi hijo recibía debido a su enfermedad” -dijo a este reportero Eloina Gálvez.
Agregó que se le quiebra el corazón cada vez que tiene que acostar a su hijo sobre unos pedazos de sábanas sobre el colchón destruido por el orine. El pasado domingo dos funcionarios del Partido Comunista le prometieron dos colchonetas, pero afirmó que  lo creerá cuando las vea en su casa.

Alejandro, de 32 años, quien también padece de epilepsia e hidrocefalia, necesita un sillón de ruedas para desplazarse. La familia reside en la comunidad Maboa, municipio Santo Domingo, provincia Villa Clara.