LA HABANA, Cuba, 9 de marzo, (Yusnaimy Jorge Soca, www.cubanet.org) -Siete jóvenes balseros que recalaron el pasado 6 de junio de 2009 en el Malecón habanero, frente a la Oficina de Intereses de los EE.UU, están presos en la cárcel Valle Grande desde hace casi nueve meses, sin que aún les hayan formulado petición fiscal ni celebrado juicio. Los jóvenes creen que son castigados por la policía política debido a la relevancia que tuvo el hecho, al difundirse la noticia por los medios de prensa y televisión internacionales.

El intento de huida se produjo el día 4 de junio, por el litoral de Habana del Este, en una embarcación rústica que construyeron ellos mismos con madera y poli espuma, para navegar a remo, sin motor. Los siete jóvenes son vecinos del municipio Marianao, en La Habana, y dicen que sus motivaciones para tratar de escapar de la Isla fueron la miseria en que se encuentra sumido el país y la falta de libertades y oportunidades de progreso individual.

Ninguno de los jóvenes tenía deudas con la justicia ni cometieron actos que calificaran como delito, en esa acción. La salida ilegal no se contempla como violación de las leyes en el Código Penal vigente.

Según sus testimonios, después de dos días de travesía se deterioraron las condiciones del mar y el temor a ahogarse o naufragar hizo que regresaran a Cuba.

Llegaron a la costa en horas de la mañana, cerca del legendario Castillo del Morro. Allí los esperaban apostados una veintena de policías y el miedo a las represalias los hizo tirarse nuevamente al mar. Por espacio de cuarenta minutos trataron de evadir el acoso de la lancha y la patana que los perseguían e intentaban acorralar su embarcación en la bahía. Agotados, recalaron justamente frente a la Oficina de Intereses de los EE. UU.

Fueron arrestados, sin ofrecer resistencia,  y los condujeron al Departamento de Guarda Fronteras, en el barrio Jaimanitas. De allí fueron trasladados a la sede central de la Seguridad del Estado, conocida como Villa Maristas, donde permanecieron en celdas tapiadas durante dos semanas y sometidos a interrogatorios. La Seguridad del Estado quiso forzarlos a declarar que ellos habían orquestado una provocación para ridiculizar a la Revolución ante la opinión pública.

Finalmente los trasladaron a la prisión Valle Grande donde aún permanecen. Sus abogados no les pueden explicar cuál es el fundamento legal para mantenerlos en prisión. Ya pagaron una multa de 5 mil pesos que, por su parte, les aplicó Capitanía del Puerto por navegar sin permiso.

Los jóvenes balseros son Yoel Martínez Lima, Marjoy Díaz Peña, Eligio Campanioni Figueredo, Raudel González Soto, Omar Rosabal Díaz y Jorge Luís Cáceres.