JATÍBONICO, Cuba, 24 de junio, (Osmany Borroto Rodríguez, Agencia Yayabo Press / www.cubanet.org) -Omar Ulloa Bonachea, vecino de Jatibonico, provincia de Sancti Spíritus, falleció el 13 de junio, debido a una intoxicación producida por la ingestión de la bebida alcohólica conocida popularmente como “caballo blanco”, la cual es elaborada en el central Uruguay, de esta localidad.

Durante el sepelio de Omar, numerosas personas comentaban que la ingestión de ese brebaje ha ocasionado la muerte o el considerable deterioro físico de otras personas. No obstante, el licor continúa vendiéndose.

A pesar de ser conocidos esos efectos dañinos del venenoso líquido, que se elabora con desechos del ingenio, los alcohólicos de la ciudad siguen consumiéndolo, debido a su precio relativamente bajo, ya que se vende la botella grande a siete pesos, y la más pequeña, conocida popularmente como “sábado corto”, por tres pesos con cincuenta centavos.

Este reportero realizó una mini encuesta entre los jatiboniquenses y la gran mayoría expresó que la comercialización del rústico licor representa una amenaza contra la vida humana y la salud pública, y que debería prohibirse su venta por representar un peligro social.