SANTA CLARA, Cuba, 3 de junio (José Guillén / www.cubanet.org) – El señor Rafael Rancio fue detenido por dos policías el pasado 31 de mayo, cuando transportaba 15 libras de costillas de res.

“Le dije a los policías de la patrulla que había comprado los huesos en una carnicería para hacer una caldosa y celebrar el cumpleaños de mi hija, pero me llevaron para la estación alegando que tenían que verificar, porque la osamenta tenía mucha carne y en las carnicerías no las vendían así”, explicó Rafael.
 
Agregó que estuvo en la estación desde las 5 de la tarde, hasta que pasadas las 8 de la noche llegó un capitán a quien le explicó el motivo de su detención. “El oficial ordenó que me entregaran los huesos y me liberaran sin formularme ningún cargo” –concluyó Rafael.