IMPRIMIR
Recordando La Patria es de Todos  (Segunda parte)

Martha Beatriz Roque Cabello

LA HABANA, Cuba, julio, www.cubanet.org -Sin dejar de referirnos a la forma en que se ha tratado de tergiversar la historia, se continúan haciendo relatos de cosas que en algún momento han sido olvidadas, porque no han quedado escritas, sólo aquellos que las vivimos las llevamos grabadas en la memoria y es importante que podamos trasladarlas a los que no las conocen.

Varias generaciones de cubanos tienen una visión equivocada de la república democrática, incluso el 20 de mayo dejó de ser Fiesta Nacional. Sin embargo las estadísticas muestran que entre 1902 y 1958, nuestro país estaba situado entre los tres más avanzados de América Latina e incluso se encontraba en algunos indicadores por encima de grandes naciones del Viejo Continente, como España e Italia.

Los cubanos en ese período eran trabajadores y mantenían un alto espíritu empresarial, resultando ser excelentes hombres de negocios.

Entretanto, durante muchos años se consideró la cifra de veinte mil muertos, victimas del gobierno de Fulgencio Batista, pero nunca se lograron documentar, por lo tanto la cifra no se pudo sustentar. Igual sucede con el número de analfabetos antes de 1959, que ascendía al 16% de la población y no al 49% como se consignó.

De forma inhumana, injusta, ilegal  y también antidemocrática, se pueden catalogar los juicios celebrados al triunfo de la revolución a los batistianos; los que fueron detenidos, juzgados y ejecutados masivamente en menos de 24 horas, a pesar de que se reconoció que los mayores implicados huyeron del país. Pero un caso notorio, fue el juicio de los pilotos sancionados después de haber sido absueltos, el cual llevó al suicidio al capitán Félix Pena.

Al igual que ha continuado siendo hasta hoy, aquellos juicios no guardaron la menor relación con lo que es un debido proceso, ni con un verdadero derecho a la defensa.

Aunque el gobierno totalitario ahora insiste en decir que lo mismo ocurre en cualquier lugar del mundo, su arribo al poder quedó signado por un feroz ajuste de cuentas y también por la forma en que se incitó a odiar al pueblo, que pedía sangre en las concentraciones públicas, al grito de ¡Paredón!

Recientemente, el ex presidente Fidel Castro previno al mundo de la inminencia de una guerra nuclear, como siempre, culpando a los Estados Unidos de América, pero no mencionó que la dirigencia cubana propuso a Moscú, durante la llamada “Crisis de Octubre” -en 1962- asestar el primer golpe nuclear, sin esperar a que los “yanquis” tomaran la iniciativa. Esta acción propuesta por Castro hubiera significado, sin lugar a dudas, una catástrofe para toda la humanidad, pero Cuba hubiera sido barrida del mapa. La población cubana, ni siquiera conocía que existían en el territorio nacional armas nucleares y tropas extranjeras.

Hay que recordar con qué desembarazo  habla la alta jerarquía del gobierno cubano del terrorismo que tiene lugar en cualquier lugar del planeta y cómo acusa de terroristas a sus opositores, sin embargo el 26 de julio de 1953, fecha en que se plantea que “todo empezó a cambiar”, se derramó tanta sangre, durante el asalto al Cuartel Moncada, que es difícil encontrar en la historia cubana otro día tan luctuoso y fratricida como ése; sin embargo, se celebra como un día festivo.

Podemos recordar también otros hechos, como la llamada “noche de las cien bombas”, el 30 de junio de 1957, en que fallecieron Josué País (hermano de Frank), Floro Vistel y Salvador Pascual, en un ataque a las fuerzas de la dictadura, después de que un dispositivo que iba a estallar en medio de la ciudad de Santiago de Cuba, fuera desactivado accidentalmente por los bomberos al limpiar con chorros de agua las calles, ya que se iba a celebrar un mitin político por parte de los gobernantes, en el parque Céspedes. Estos explosivos puestos en una alcantarilla por los revolucionarios, no tenían nombre, la acción se ejecutó sin pensar en cuántos ciudadanos inocentes hubieran perecido.

Con el objetivo de no hacer el documento interminable, se tomaron apenas algunos ejemplos de los sucesos acaecidos durante todo el tiempo en que se ha tratado de engañar al país, se pudieron haber narrado muchos más hechos que, indiscutiblemente, servirían para que los autores de La Patria es de Todos pudieran mostrar más detalladamente, la forma en que los comunistas han querido interpretar la historia; pero los que se contaron resultaron suficientes para levantar la ira de la dictadura en contra del Grupo de Trabajo de la Disidencia Interna.

Enlace relacionado:
Recordando La Patria es de Todos (Parte 1) http://cubanet.org/CNews/y2010/junio2010/30_C_6.html




http://www.cubanet.org/inicio_tienda.html
 
CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores y autoriza la reproducción de este material siempre que se le reconozca como fuente.