IMPRIMIR
El horizonte agrícola

Lucas Garve, Fundación por la Libertad de Expresión

LA HABANA, Cuba, julio (www.cubanet.org) - Por el momento no se despeja el horizonte de la agricultura en Cuba. En contra de las buenas voluntades, muchas barreras se levantan contra este sector de la economía. A pesar de las imágenes de los reportajes de la televisión, los esfuerzos de las ferias dominicales en las calles habaneras carecen de resultado sistemático.

En las ferias hay poca variedad de productos agropecuarios. Generalmente piñas, mangos, plátanos, limones, ajíes, papas, constituyen la base de la oferta, pero faltan vegetales, granos, dulces, comestibles en conserva.

La escasez de granos en las tarimas de los mercados (negros, colorados, blancos) elevó los precios hasta quince pesos la libra. Téngase en cuenta que los granos son indispensables en la dieta del cubano. A lo anterior se une que el arroz también escasea desde hace meses, y se oye decir con frecuencia que el hambre aprieta.

Hasta ahora, una de las vías emprendidas para aumentar la producción agrícola, y sustituir importaciones de productos agropecuarios, es la entrega de tierras ociosas a quienes voluntariamente deseen trabajarlas. Alrededor de 2 mil 200 usufructuarios han obtenido concesiones de tierras en La Habana. El gobierno insiste en promover la agricultura suburbana como solución del abastecimiento de verduras, granos y otros renglones agropecuarios, a los mercados de la capital. Hasta ahora, el resultado es parcial.

La distribución de tierras ociosas, según la propaganda oficial, avanza lentamente a través de un túnel de papeleos y controles. Sólo 1 millón 400 mil hectáreas entraron en el proceso de concesión en los veinte meses de aprobada que tiene la Ley 259. Agréguese a lo anterior que los usufructuarios las ocupan con las manos atadas por los controles estatales, sujetos a producir los frutos que indica el contrato.

Cienfuegos, Ciego de Ávila, Camagüey, Las Tunas, son las provincias donde el proceso avanza con cierta agilidad. Sin embargo, los resultados no son los esperados, si se tiene en cuenta que solamente el 46 % del total de tierras entregadas produce algo. Primero, debido a las barreras naturales: marabú, sequía; a lo que se añade la falta de experiencia de muchos usufructuarios. En segundo lugar, hay como mínimo tres niveles de funcionarios pertenecientes al sector agrícola, que obstaculizan más que benefician a los agricultores.

Para poner el tapón al embotellamiento agrícola, está la falta de herramientas y maquinarias; calzado y vestimenta adecuados; escaso apoyo financiero, a lo que se une los altos precios de algunas herramientas que venden en algunas tiendas.

En cuanto al incremento de la agricultura suburbana, los bajos salarios no son atractivos para quienes prefieren quedarse en la puerta de su casa y sobrevivir con la venta de duro frío, cremitas de leche, turrón de maní, y ropa.

Una vez examinado este asunto crucial para la economía del país, se puede concluir que aún no vislumbramos los éxitos agrícolas que beneficien a la población.




http://www.cubanet.org/inicio_tienda.html
 
CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores y autoriza la reproducción de este material siempre que se le reconozca como fuente.