LA HABANA, Cuba, 14 de julio, (Damián Sánchez Sáenz, Buró Información Comisión Martiana / www.cubanet.org)  -De alarmante se puede calificar el auge de la práctica de vender los exámenes finales a los alumnos en los tecnológicos y facultades de la capital cubana, por parte de los profesores.

A un precio de 5 CUC (125 en moneda nacional) fueron vendidos por los maestros los exámenes finales en la facultad Rafael Carini Millán y el tecnológico Armando Mestre, ambos ubicados en el municipio Arroyo Naranjo. En este último centro, algunos profesores permitían a los alumnos cometer fraudes a cambio de meriendas u otros obsequios.

Una estudiante de la Facultad de Economía en la calle L y 21, en el Vedado, señaló a este reportero que la mayoría de los maestros están involucrados en la práctica y ven en ello una vía para complementar sus bajísimos salarios. La estudiante, que requirió anonimato, terminó diciendo: ya no se esconden para recibir el dinero o los “regalos”, los perjudicados son los alumnos de familia más pobres, esos si tienen que estudiar duro para pasar de grado.

En algunos centros estudiantiles, los profesores son más discretos.  En lugar de vender el cuestionario, se reúnen con los alumnos la noche antes del examen para “repasarles”  y allí se realiza el negocio. Algunos padres consideran que el problema de la venta de exámenes ha aumentado desde la creación, debido a la escasez de profesores,  de los llamados Profesores General Integrales (PGI), jóvenes que en su mayoría no alcanzan los 20 años de edad, con muy poca preparación y ninguna experiencia en la profesión.