ISLA DE LA JUVENTUD, Cuba, 2 de febrero (Lamasiel Gutiérrez, Isla Press / www.cubanet.org) - Desde el hospital general docente Héroes de Baire, en Nueva Gerona, el prisionero político Fidel Francisco Rangel dirigió una carta a la opinión pública, donde denuncia que fue quemado en segundo grado en el abdomen y el pecho por un preso común nombrado José Alberto Tizón.

“La carta tiene el propósito de denunciar mi situación y el peligro que corre mi vida en una celda de la prisión El Guayabo, de 3 metros por 2, infectada  de ratones, jejenes cucarachas, arañas y mosquitos, donde debo cumplir una condena de 25 años”.

Más adelante refiere el recluso que fue trasladado por órdenes de la policía política a un área donde conviven prisioneros enfermos de Sida junto a reos de alta peligrosidad. Y añade: “De esto se desprende que el suceso pudo ser premeditado, con el ánimo de castigarme por mis manifestaciones en contra del gobierno dentro de la prisión. Incluso a Tizón, el preso que me dio candela,  lo he defendido de los ataques de los carceleros”.

Por último, Rangel da fe de que lo expuesto en su carta en cien por ciento verdad, y pide protección de las organizaciones internacionales de derechos humanos.