Rafael Ferro Salas

PINAR DEL RÍO, Cuba, abril (www.cubanet.org) - Las integrantes de la Federación Latinoamericana de Mujeres Rurales (FLAMUR) de esta provincia se reunieron para firmar una declaración de reclamo por la libertad de los presos políticos, y exigieron a las autoridades la circulación de una moneda única dentro de la isla.

“FLAMUR es una agrupación continental de carácter civilista, pero aquí en Cuba nuestro trabajo no recibe apoyo y mucho menos ayuda de las autoridades, estamos al margen debido a la condición totalitaria del régimen imperante. Esto quiere decir que cada actividad que hacemos se considera política, de ese modo nos juzgan. El reclamo por la liberación incondicional de los presos políticos es algo en lo que nos hemos involucrado como cubanas, considerándolo un deber. Esos presos luchan también por los derechos de nosotras las mujeres de este país”, dijo al inicio de la reunión la señora Minerva Corbillón, coordinadora de FLAMUR y miembro de la Junta Nacional de la mencionada agrupación.

El reclamo por la circulación definitiva dentro de Cuba de una moneda nacional ha sido constante por parte de las mujeres de FLAMUR. En la isla circulan en la actualidad tres tipos de monedas; el dólar americano, otra denominada CUC equiparada al dólar internamente, y el peso cubano.

“Las cosas vitales estamos obligadas a comprarlas en tiendas por moneda convertible (CUC) y si tenemos en cuenta el salario medio de los cubanos (250 pesos) la cuenta no da por ningún lado. El peso cubano está como proscrito, ha sido casi marginado; consideramos que eso es algo que va hasta contra la dignidad nuestra. Es por eso que FLAMUR tiene como consigna cotidiana el reclamo por la definitiva circulación  del peso cubano como moneda única dentro de nuestra patria, es un derecho que tenemos a exigir eso”, declaró la señora Idabel Martín, ama de casa y activista.

A la actividad fueron invitados vecinos de la localidad. La señora Rosa Madera, de 52 años, es una de estas personas. Tiene cuatro hijos y su esposo está recluido en la prisión provincial por un delito común.

“Mi esposo era el único sostén en mi familia. Por desgracia cayó preso y allí conoció de la labor de los reclusos políticos. Cuando lo visito me habla mucho sobre el valor y la integridad de esos hombres, a los que ya considera sus hermanos. Asisto a esta reunión en representación de mi esposo y en agradecimiento a todos los que en Cuba luchan por nuestros derechos” –dijo la señora.

Además de los talleres constituidos, la junta directiva de FLAMUR incluye en su plan de trabajo el desarrollo de conferencias y programas de clases dirigidos a la población, principalmente a las amas de casas. Recientemente se llevó a efecto un ciclo sobre violencia doméstica, que tuvo gran aceptación entre los participantes.