Internet colectivo para beneficio del sistema totalitario

Miguel Saludes

MIAMI, Florida, abril, (www.cubanet.org) -El viceministro cubano de comunicaciones aseveró recientemente que en el país se trabaja por el acceso social de los ciudadanos a las novedosas tecnologías de la información. Las declaraciones de Boris Moreno Cordovés fueron publicadas el pasado 6 de febrero en el diario Juventud Rebelde. El énfasis de la participación social ciudadana en este servicio, es la clave para comprender que el esfuerzo gubernamental para el desarrollo de Internet tiene sus límites.

El funcionario expresó que su ministerio no está interesado en restringir el uso de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones, sino todo lo contrario, pues están convencidos que el mundo actual no puede prescindir de este avance. Pero la pregunta del periodista sobre la accesibilidad individual al medio, encontró la respuesta escurridiza de Boris Moreno. Según el titular no existe ninguna limitación desde el punto de vista político, salvo para aquellos sitios que estimulen el terrorismo, alienten la subversión del orden establecido y el que se ha dado el propio pueblo cubano.

La avalancha incontenible que significa la ventana abierta al mundo en la red de redes preocupa a los guardianes de la pureza ideológica. El caudal de información y el intercambio de ideas que se establece por esa vía es el mayor reto que deben enfrentar. Por eso buscan mantener su control. Para que esto suceda acuden a la colectivización en el uso de la novedosa tecnología. Herramientas tan peligrosas como los blogs, solo podrán aparecer bajo la sombra protectora de la entidad estatal. Los independientes encontrarán todo tipo de impedimentos y de ser posible la prohibición.

El conocido blog Generación Y de Yoani Sánchez ha sido suficiente motivo para inquietar a los controladores del pensamiento. Además de establecer un bloqueo férreo para impedir su acceso, diseñaron una campaña inquisitorial contra su autora. Las presiones no se quedan en el plano prohibitivo, ni en la estigmatización, sino que han sido llevadas al terreno psicológico con el fin de aniquilar curiosidades temerarias. 

La página electrónica Cambios en Cuba colocó en su sitio una serie de videos donde tres jóvenes católicos de Santiago de Cuba daban su versión sobre un encuentro sostenido entre ellos y la bloguera Yoani Sánchez. Las entrevistas aparecieron bajo el rótulo de You Tube, una de las más concurridas por el público que navega libremente por los causes ínter náuticos. 

Quienes deseen entender como funciona, aunque sea medianamente, el clima opresivo y represivo dentro de Cuba, solo tienen que asomarse a estos cuadros patéticos, donde se trata de explicar la actitud provocadora de una supuesta acción contra revolucionaria dirigida por Yoanis y auspiciada por un destacado sacerdote de la institución católica.

Desde una oficina cargada con detalles y atmósfera densamente oficial, los estudiantes David Acosta, Camilo de la Paz y Leyanet Pozo se esfuerzan en exponer lo ocurrido en la Iglesia Santa Teresita del Niño Jesús. Con palabras entrecortadas, incoherentes, vagas y con evidente nerviosismo, los entrevistados se refieren a un encuentro sostenido entre un grupo de jóvenes de la parroquia y Yoani.

Contradiciendo lo dicho por las autoridades cubanas respecto al desarrollo alcanzado en tecnología de comunicación informática, Leyanet expresa que Yoani, a quienes todos mencionan como “la muchacha”, habló de hacer algo para mandar “cosas”. Así se refiere una joven de nivel universitario a los blogs. Por su parte De la Paz, estudiante de historia que dice ser un hombre de fe en Cristo y nada más, se lamenta por haber sido víctima de lo que él llama un engaño. Si los jóvenes reunidos con Yoani hubieran sabido que la propuesta olía a contrarrevolución todos sin excepción se hubieran ido del lugar. La oferta maldita consistía en el aprendizaje de algo tan terrible como crear un blog, una forma de manifestación personal e independiente.

Antonio Pozo, identificado como padre de Leyanet, pone un punto interesante en este trabajo. El objetivo de la supuesta reacción a tan repudiable acto provocativo iba mucho más allá de la figura de Yoanis.  “Ese hombre hay que desaparecerlo de aquí.” El llamado cuasi terrorista hecho por el señor Pozo clamando por desapariciones, es lanzando contra el sacerdote católico José Conrado, autor de sendas cartas dirigidas a los gobernantes cubanos Fidel y Raúl Castro, respectivamente. La última de las misivas fue publicada en meses pasados.

Evidentemente el uso colectivo de Internet estará previsto para contrarrestar el flujo del pensamiento, poniendo la tecnología al servicio de la propaganda ideológica y la represión. De todo esto Cambios de Cuba es un ejemplo modélico. Muchos de los materiales insertados en esa página parecen provenir de una fuente altamente oficiosa. El diploma acreditado a Oscar Mario González por los cursos dirigidos desde una Universidad en Miami, había sido ocupado al periodista por agentes de la policía política. Ahora la serie de entrevistas realizadas a los estudiantes santiagueros tiene igualmente un matiz policial. El local, micrófonos sostenidos por una mano anónima, el enfoque dado al tema, las respuestas dadas a preguntas que no se escuchan y los constantes flash de las cámaras tiene mucho de ese estilo.

Esa será una de las funciones esenciales de las páginas autorizadas para el acceso colectivo. A ellas y su desarrollo estará dedicado todo el esfuerzo profundizador del gobierno, como declarara en la entrevista a Juventud rebelde el vice ministro Cordovés.