23 de mayo de 2008       VOLVER AL INICIO
 
 

Movilizaciones forzadas para paliar el déficit de mano de obra en Holguín

Ivette García, Holguín

Una ola de movilizaciones forzadas hacia la agricultura ha sido puesta en marcha por parte del poder político en Holguín, ante el éxodo de campesinos de las granjas estatales.

Unos 300 obreros de diferentes empresas y fábricas de la capital provincial han sido movilizados por espacio de un mes en la granja Limoncito, ubicada en el municipio de San Germán, en lo que se anuncia como "la primera etapa" del programa de reclutamiento.

En el "acto de abanderamiento del contingente", el líder del Partido Comunista en el municipio de Holguín, Francisco Batista, reconoció que "faltan brazos en los campos".

"Pero los revolucionarios holguineros asumiremos este sacrificio porque es necesario para que el pueblo tenga alimentos", dijo.

Ya suman dos los llamados practicados en lo que va de año y, para garantizar la adhesión de los trabajadores, el Partido Comunista ha utilizado como punta de lanza a la Central de Trabajadores de Cuba (CTC, único sindicato legal en la Isla, controlado por el gobierno) y a las administraciones de las empresas.

"Hemos recibido amenazas de todo tipo, han cuestionado la militancia del partido, los estímulos salariales y hasta la permanencia en las empresas", dijo Mario T., un obrero de la Fábrica de Implementos Agrícolas. "Aún no han movilizado a nadie de mi empresa, pero ya están preparando el terrero", añadió.

Entre las tareas que deben asumir los movilizados están la siembra, fertilización y chapea de unas 30 caballerías de tierra que estaban subutilizadas por la carencia de empleados agrícolas.

La granja de Limoncito es la más importante entidad que tributa alimentos a la capital provincial (de 300 mil habitantes) y debe producir alrededor del 30% de los vegetales demandados por los holguineros, pero en estos momentos está a punto de colapsar debido al déficit de al menos unos 80 obreros agrícolas, según Jorge, un ex empleado.

"También las improvisaciones en la atención a las plantaciones están destruyéndolo todo. Los movilizados sólo vienen por cumplir y, más que ayudar, empeoran los cultivos", declaró Jorge, quien planea emigrar a la ciudad. "Nos pagan salarios míseros y no tenemos ni qué comer ni médicos para curarnos", indicó.

Una fuente vinculada al poder político manifestó, desde el anonimato, que se ha creado una comisión en la sede del Partido Comunista en Holguín para seleccionar a todo el personal necesario.

"Se deben conseguir al menos 3.000 movilizados en lo que resta de año, para poder salvar las producciones de las granjas estatales, ya que la situación es verdaderamente difícil allí y, por ende, la cantidad de alimentos que recibe el pueblo es insuficiente", dijo la fuente.

Para lograr sus objetivos, los organizadores de las movilizaciones forzadas hacia el campo prevén además que las Brigadas Estudiantiles de Trabajo (BET), que desarrollan estudiantes universitarios en un período de 15 días de sus vacaciones, se concentren como prioridad en las granjas estatales.

 

 

 

 

 
 
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