El politólogo y diplomático brasileño Antonio Rangel Bandeira afirmó que las reformas emprendidas por el gobernante Raúl Castro intentan implantar en Cuba el modelo chino con el respaldo de los militares, y consideró que el régimen depende fundamentalmente de la ayuda de Venezuela para poder mantenerse.

"Creo que intentan en lo básico el modelo chino de ‘capitalismo de Estado', principalmente ahora con Raúl (...) Los militares se volvieron los administradores de las empresas estatales, y con eso, con los privilegios que tienen en relación con los civiles, el Partido [Comunista] mantiene a los militares leales al gobierno'', opinó Rangel Bandeira en una entrevista con el periódico digital MDZOL, dela provincia argentina de Mendoza.

El prestigioso intelectual --reconocido como un hombre de izquierdas y admirador del guerrillero Ernesto "Che'' Guevara-- consideró que el sistema económico implantado en Cuba no puede mantenerse por sí mismo y "necesita desesperadamente de la ayuda de [el presidente venezolano] Hugo Chávez''.

Personalidad multifacética, combatiente clandestino y exiliado durante los años de la dictadura militar brasileña, vinculado a los revolucionarios en Portugal y asesor del gobierno de Salvador Allende en Chile, Rangel Bandeira es autor de Sombras del Paraíso (1994), un libro de desencanto de la revolución cubana que provocó entonces fuertes críticas de Fidel Castro.

Sombras del Paraíso, prologado por el ex presidente portugués Mario Soares, fue el resultado de una visita realizada como invitado especial de Castro, quien se incomodó con el libro de 543 páginas escrito por Rangel Ribeira y lo consideró "un torpedo traicionero, un ataque por detrás''.

"Soy de la generación de 1968, y crecimos tomando como modelo el régimen cubano, que nos parecía compatibilizar justicia social con más libertad'', explicó el autor. "Nos equivocamos, pues la justicia alcanzada era artificial, basada en los millones invertidos por la Unión Soviética en la isla, y la libertad se volvió más limitada que en la dictadura de [Fulgencio] Batista''.

Rangel Bandeira asevera que a pesar de los ‘colores revolucionarios', "el régimen cubano se inserta en la tradición de las dictaduras latinoamericanas subdesarrolladas y caudillescas''.

"Si es comparada con la Alemania comunista y con la Unión Soviética, Cuba ha desarrollada un sistema más eficiente y total de control del individuo, mucho más sofisticado'', apuntó el diplomático. "Fidel [Castro] ha vuelto los modelos totalitarios idealizados por George Orwell y otros teóricos en una realidad tenebrosa''.

Viceministro de Desarrollo Social durante el gobierno de Fernando Henrique Cardoso (1995-2003), Rangel Bandeira cuestionó incluso los proclamados logros del gobierno cubano en la educación y la salud pública.

"Hay que preguntarse: ¿qué educación reciben? ¿De qué vale una educación dirigida, dogmática, que no enseña a pensar, sino solamente a repetir el discurso oficial? Y la salud pública, mentenida por décadas con el dinero soviético, ahora (...) está en decadencia total'', manifestó.

Rangel Bandeira señaló que el embargo estadounidense ha sido siempre un pretexto para no abrirle espacio a la oposición y la crítica internas, aunque cuestionó la política de Washington como responsable de "la continuidad de la dictadura cubana''.

"El mayor soporte de la dictadura de Fidel siempre fue la intransigencia de los gobiernos de Estados Unidos, a pesar de las apariencias en contra. Uno necesita del otro para mantenerse en el poder'', aseveró.

Respecto al Che, el politólogo brasileño admitió que en la imagen del mítico guerrillero prevalecen "sus intenciones abnegadas'' y se ocultan los métodos que utilizó fusilando a centenares de opositores, sin derecho a defensa, en los primeros días de la revolución castrista.

"Pero políticamente era ingenuo'', sentenció. "Estaba más para santo y mártir que para reformador social''.