El director de Migración de Honduras, German Espinal, y el secretario general de la Cancillería, Ramón Rivera, renunciaron el viernes temporalmente a sus cargos para permitir una investigación sobre un supuesto tráfico de cubanos, informaron fuentes oficiales. Ninguno de los dos ha sido implicado.

"Creo que es ético y es digno que ponga a la disposición del ministro de Gobernación (Víctor Meza) el cargo de director de Migración, a efecto de no entorpecer de ninguna manera las investigaciones", anunció Espinal en rueda de prensa, reportó la AFP.

El vicecanciller Eduardo Reina informó en otra comparecencia que también Rivera había puesto a disposición su cargo.

Meza, al igual que el canciller Edmundo Orellana, anunciaron la aceptación de las renuncias de sus subalternos.

"Cada vez que se lleva una investigación a lo interior de una institución del Estado, los responsables de esa institución deben poner a disposición su cargo para que la investigación pueda proceder sin obstáculos, sin contratiempos, sin desencuentros", señaló Orellana.

El ministro de Gobernación dijo que se nombró una comisión para investigar denuncias sobre una supuesta falsificaron de firmas de funcionarios hondureños en documentos de permisos de trabajo concedidos a cubanos.

El cónsul de Tegucigalpa en La Habana, Reynieri Amador, presentó ante autoridades de la Cancillería hondureña, que lo llamaron en el marco de la investigación, un informe sobre los visados que ha otorgado el consulado en la Isla, reportó EFE.

El Ministerio Público investiga un centenar de visados otorgados a cubanos entre 2006 y 2007 por solicitud de entidades del gobierno de Honduras, para establecer si hubo irregularidades en su tramitación, según fuentes de esa institución, que aún no implica a alguien en el caso.

Decenas de cubanos llegaron a Honduras con visados que contenían firmas o sellos falsificados, entre otras irregularidades, y posteriormente viajaron a Estados Unidos.

La Cancillería denunció hace un mes ante el Ministerio Público una solicitud de visados para seis cubanos, supuestamente enviada por el Instituto de la Propiedad, que no se tramitó al descubrirse la falsificación de la firma de su director, Rafael Medina.

Al apartarse temporalmente de su cargo, el director de Migración dijo que instruyó a sus subalternos para que brinden toda la cooperación necesaria a los investigadores.

"Puedo sentirme libre de cualquier responsabilidad frente a este (acto) ilícito", afirmó Espinal.

Rivera afirmó que se retiró temporalmente del cargo en la Cancillería porque "uno no debe decir que es honrado, sino demostrarlo". Sostuvo que no fue él sino un asistente, no identificado, quien firmó algunos visados bajo investigación.