Escape a la Feria del Libro

Reinaldo Cosano Alén, Sindical Press 

LA HABANA, febrero (www.cubanet.org) -  La XVII Feria Internacional del Libro de La Habana 2008, a efectuarse del 13 al 24 de febrero, y que viajará después por cuarenta ciudades del país, dará la oportunidad una vez más a los capitalinos a darse una escapada a la antigua fortaleza La Cabaña, lugar donde se lleva a cabo la Feria.

Entre libros, paseos, espectáculos, conversatorios, los habaneros pueden olvidar por unas horas sus preocupaciones: transporte, discursos políticos que se repiten con el mismo mensaje ineficiente, la lucha diaria por la sobre vivencia, las irritantes colas, y disfrutar de una pizza, un helado y, de paso, comprar un libro o asistir a una conferencia de un poeta.

Una encuesta oficial del pasado año en el recinto ferial, reveló que sólo el 11 por ciento asistió para comprar libros, mientras el restante 89 por ciento visitó la Feria para participar de los recitales, conciertos, conferencias, debates con autores y espectáculos festivos.

En esta edición de la Feria, la Comunidad Autónoma de Galicia ocupa el sitial de honor. Más de 200 delegados gallegos, incluidos treinta editores, autores y artistas, ofertan más de 6 mil títulos.

Nancy Pérez, de la Xunta de Galicia, declaró que la propuesta “representa la Galicia moderna, culta, abierta al mundo como parte del proyecto de internalización de la cultura gallega”. De La Habana partirán a otros países latinoamericanos.

La nación cubana, partida en dos, no tiene el mismo propósito que Galicia: moderna, culta y abierta al mundo.

Vuelve a aparecer en la Feria Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, edición cubana, con una tirada de 5 mil ejemplares. También se presentan en la Feria los libros En el cielo con diamantes y Los que se fueron y los que se quedaron, de los cubanos Senel Paz y Luis Báez, respectivamente.

Entre los atractivos títulos extranjeros que se presentan, se encuentran la biografía novelada Pancho Villa, del mexicano Paco Ignacio Taibo II, edición cubana, y la novela La historia del circo de Lisboa, de Premio Nobel José Saramago.

En la Feria se le concede amplio espacio a la narrativa, la poesía, la literatura infantil, científico técnica, sociopolítica, distribuidos en ocho millones de volúmenes, según fuentes oficiales. Pero no podrá encontrarse un solo libro de Mario Vargas Llosa, Guillermo Cabrera Infante, Raúl Rivero y otros muchos, quienes no han podido traspasar el blindaje bibliográfico fundamentalista del régimen de La Habana.

En 1959 Fidel Castro dijo: “Al pueblo no le decimos: ¡cree!; le decimos: ¡lee!

El 11 de mayo de 1959 fue confiscado el Diario de la Marina, decano de la prensa escrita cubana. Luego todos los medios de comunicación quedaron en poder del estado. Muchos desaparecieron. Los que se mantienen y los de nueva creación continúan en manos del mismo dueño.

Fuente de cultura y jolgorios diversos, ¡qué buen escape resulta la Feria del Libro para los habaneros!