Una Misa del Gallo para recordar.

MORÓN, Cuba, 29 de diciembre, (José Manuel Caraballo Bravo, APLA / www.cubanet.org) -Morón es una ciudad muy religiosa, es por ello que además de los cientos de santeros con sus casas de consultas, donde vienen todos los fines de años extranjeros, preferentemente de México, para “hacerse santo”, y las decenas de casas de culto perteneciente a la llamada Asamblea de Dios, tiene varias iglesias o templos: Adventista, Bautista, Evangélica, Metodista, Protestante, Testigos de Jehová, y la más visitada, la Católica.

Precisamente en esta última se llevó a cabo la tradicional Misa de Gallo el pasado 24 de diciembre, en víspera del día 25, conmemoración del Nacimiento del niño Jesús. El templo, como nunca antes, se mantuvo abarrotado de feligreses, incluyendo a estudiantes extranjeros de medicina, a tal punto que algunos tuvieron que permanecer frente a la puerta de la Iglesia por no existir más capacidad.

Mientras en la ciudad, muy pocos pudieron disfrutar de la acostumbrada cena de Nochebuena, por la carencia de carnes y vegetales en la red estatal de mercados, la que intentó sustituir a los particulares sin éxito, muchos fueron a orar a la Iglesia Nuestra Señora de La Candelaria, para pedirle a Dios, a La Virgen o a los santos un verdadero próspero año 2009.

El párroco, Juan Pozuelo, de nacionalidad española habló en su homilía sobre las dificultades por las que atraviesa el mundo y los cubanos como parte del mismo, y dijo que junto a Dios no debe haber temor, porque al final el bien triunfará sobre el mal.

Miembros de la prensa independiente presentes en la Misa del Gallo, oraron por la liberación de los presos políticos, y en especial por nuestros colegas enfermos en las cárceles, Normando Hernández González, Pedro Argüelles Morán, y Pablo Pacheco Ávila.