Urinario para el artista

PRISIÓN EL GUAYABO, ISLA DE LA JUVENTUD, Cuba, 15 de abril (Fabio Prieto Llorente / www.cubanet.org) -  Según los reclusos de esta prisión, el general encargado de preparar la visita del trovador Silvio Rodríguez preguntó: “¿Dónde está el baño en el que Silvio va a orinar si le entran ganas?

Al mostrarle el servicio sanitario de los guardias, el general sonrió: “¿Y ahí va a orinar Silvio? ¡No jodan! Métanle mandarrias a eso y hagan un nuevo baño”.

Con esta orden empezaron a trabajar los presos gratuitamente -como siempre- para dejar lista la plaza. También han dejado en un esqueleto la nave frente a la plaza. “¡Le van a poner ventanas de aluminio y todo!”, dijo un preso.

El área del espectáculo será asfaltada, la guardarraya que da acceso a la prisión, después de muchos años, volverá a ser una carretera.

Los destacamentos donde conviven los presos, a veces hacinados, recibieron como mantenimiento una pintura de cal viva. No ha recibido otra cosa desde hace 30 años.
Es difícil encontrar una llave para controlar el chorro de agua cuando llega, dos veces al día a veces, y sucia. Tomacorrientes no existen. No hace falta porque las autoridades no dan ni permiten traer a la prisión ningún equipo eléctrico. Se permite un televisor por destacamento, que alberga hasta 80 reos.

Los ventiladores están prohibidos a pesar de las plagas de jejenes y mosquitos.
Durante la presentación de Silvio, quien se hará acompañar de otros exponentes de la cultura nacional, ningún preso podrá quejarse, so pena de pasar un año en la celda, según amenazó el mayor Julio Ordóñez, jefe de la prisión El Guayabo.

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