OLA
REPRESIVA
Golpean a Víctor Rolando Arroyo
LA HABANA, Cuba - 22 de febrero (Juan Carlos
Linares Balmaseda / www.cubanet.org) - Víctor
Rolando Arroyo Carmona, periodista
independiente y preso político detenido,
juzgado y encarcelado en marzo-abril de 2003,
en la Causa de los 75, fue golpeado por un oficial
carcelero cuando salía del comedor de la
prisión El Yuyal, en la provincia de Holguín,
denunció vía telefónica Elsa
González Padrón, esposa del recluso,
desde Pinar del Río, provincia de residencia
de los cónyuges.
El incidente ocurrió el pasado 6 de febrero
alrededor de las 11 de la mañana, en el
momento en que Arroyo salía del comedor
con el almuerzo para ingerirlo en su cubículo.
Entonces el carcelero, con grado de mayor y conocido
por Juan Ramón Leiva, le preguntó
que a dónde iba. Arroyo le respondió
que estaba autorizado por la dirección
del penal a comer fuera del comedor, debido a
su mal estado de salud. Cuando Arroyo se volteó
el mayor le dio un puñetazo en la cabeza
que lo tendió en el piso y continuó
pateándolo en el suelo y pisoteándole
los espejuelos y la comida.
Tras el incidente llevaron a Arroyo para una oficina
y allí lo tuvieron hasta la tarde en que
fue sacado y llevado a su galera sin explicación
alguna.
El día 9 lo condujeron a la oficina del
jefe del precinto, mayor Braudilio, donde lo esperaban
una decena de militares uniformados. Contrario
a lo que creía Arroyo que sucedería:
darle una explicación por la brutalidad
con que fue tratado, el mayor comenzó a
ofenderlo, diciéndole que la falta de respeto
había sido suya.
"Estamos muy satisfechos -le dijo el uniformado-
pues tienes sobre ti 26 años de cárcel.
Estás bien lejos de tu madre y de tu esposa,
y las visitas familiares te las pusimos bien espaciadas.
Y otra cosa, aquí no te tocan las llamadas
telefónicas, eso es un regalo del gobierno".
Después de este incidente Víctor
Rolando Arroyo Carmona se plantó en huelga
6 días sin comer, pero desistió
debido a sus secuelas crónicas dejadas
por la huelga que protagonizó meses atrás.
No se tomó ninguna medida contra el oficial
que lo golpeó. Sin embargo, la semana siguiente
un oficial de la Contrainteligencia, que atiende
esta prisión, se reunió con Arroyo,
y entre otras cosas le dijo: "No entiendo
por qué te golpearon, pues tu eres un buen
recluso, disciplinado y respetuoso".
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