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El lunes 14, manifestación
contra Fidel Castro en Madrid
Semanal Digital / Diario
Noticuba Internacional, 13 de marzo de 2005.
MADRID - La Asociación Española
Cuba en Transición promueve además
la recogida de firmas de un manifiesto para exigir
al Gobierno español que presione al cubano
para una apertura política.
11 de marzo. La Asociación Española
Cuba en Transición (AECT) ha convocado
para el próximo lunes 14 de marzo a las
12 de la mañana, junto al Ministerio de
Asuntos Exteriores (en la madrileña Plaza
del Marqués de Salamanca), una concentración
en solidaridad con el pueblo cubano bajo el lema
¡¡No a la esclavitud en Cuba!!
El motivo del acto es la visita que ese día
rendirá al ministro de Asuntos Exteriores
Miguel Ángel Moratinos su homólogo
cubano, Felipe Pérez Roque, quien entre
otras cosas deberá agradecerle el apoyo
prestado por el Gobierno español al régimen
de Fidel Castro para que la Unión Europea
suavizase su posición común de apoyo
a los disidentes en el interior de la isla.
La AECT ha establecido como objetivos de la concentración
"exigir el respeto de los derechos humanos
en Cuba y la liberación incondicional de
los presos de conciencia, denunciar la sistemática
violación de los derechos laborales de
los trabajadores contratados en Cuba por las empresas
mixtas (51% capital cubano y el 49% empresas extranjeras)
y reivindicar la consideración de los derechos
humanos como condición sine qua non en
las políticas de ayuda y cooperación
internacional.
Como representación simbólica de
estas reivindicaciones, un actor disfrazado de
Fidel Castro y rodeado de esclavos se fundirá
en un abrazo con otro actor disfrazado de José
Luis Rodríguez Zapatero, cargado de dólares,
en alusión a las presiones que algunas
empresas españolas que realizan pingües
negocios en la isla llevan a cabo para evitar
condenas de la tiranía comunista.
También se entregarán las adhesiones
firmadas al siguiente manifiesto (que puede suscribirse
en la página web de AECT):
Manifiesto ante la visita a España del
ministro cubano de Asuntos Exteriores
El lunes 14 de marzo, mientras se entrevisten
los ministros de exteriores de España y
Cuba, más de 200 presos políticos
en lucha por la democracia seguirán en
las cárceles de Fidel Castro. Cárceles
que ni siquiera la Cruz Roja puede visitar para
verificar las condiciones de internamiento de
los presos de conciencia, dispersados por todo
el país.
Mientras Moratinos sonría a Pérez
Roque habrá cubanos que, como tienen prohibida
la salida de su país, se jugarán
la vida en la mar en balsas miserables mucho peores
que las pateras que llegan a España desde
Marruecos. Hoy por hoy el Estrecho de La Florida
es la mayor tumba de cubanos sin que su gobierno
haga nada por evitarlo.
Pese a los llamamientos internacionales, el régimen
cubano no ha reconsiderado su persecución
implacable contra los demócratas cubanos.
Según la clandestina Comisión Cubana
de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional
(CCDHRN) durante 2004 se han verificado más
nuevas condenas a disidentes demócratas
que liberaciones y no se han dado los pasos exigidos
por la Unión Europea hacia el reconocimiento
de las más elementales libertades de expresión,
prensa y asociación.
Cuba sigue sin modificar las condiciones laborales
impuestas por la dictadura de Fidel Castro que
violan sistemáticamente los convenios internacionales
de la Organización Internacional del Trabajo
(OIT) ratificados por Cuba y por España.
Bajo el régimen de Castro sólo
los miembros del Partido Comunista de Cuba (PCC)
pueden emplearse en el sector turístico.
Aun así, esos trabajadores: 1) no pueden
forman sindicatos; 2) el Estado confisca el 90%
de su salario, 3) no tienen derecho a escoger
su trabajo y 4) son obligados a delatar a vecinos
y turistas si perciben cualquier actividad contraria
a las orientaciones del Partido Comunista. Por
ejemplo, tener conexión a internet o un
teléfono móvil.
Por último, la dictadura castrista ejerce
presión sobre los gobiernos extranjeros
para que no reciban a la oposición democrática.
El ex presidente checo, Vaclav Havel -que fue
preso político durante el régimen
comunista checoslovaco- ha definido esta medida
como un auténtico apartheid diplomático.
Por todo ello, reiteramos nuestra petición
al gobierno democrático de España
para que exija al canciller cubano Felipe Pérez
Roque la apertura de un proceso democratizador
en la República de Cuba. Del mismo modo
que las democracias occidentales presionaron a
Franco durante su dictadura, ahora es justo que
España haga lo mismo con Fidel Castro.
Para adherirse entrar en la siguiente página:
http://www.cubaentransicion.com
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