La estafa
cotidiana
Lucas Garve, CPI
LA HABANA, septiembre (www.cubanet.org) - Después de cuarenta años
y un poco más, aún los hechos cotidianos me obligan a recordar el
conocido libro de Eudoxio Ravines, La Gran Estafa, que desvistió a fuerza
de ejemplos al comunismo y a su sistema de la parafernalia político-ideológica
que entonces mantenía en pleno vigor engañando a buena parte del
mundo.
En el presente todavía soportamos en la isla ese proceso por causa de
recursos de sobra conocidos. Sin acudir a ejemplos grandilocuentes, enfoco la
atención al engaño que sufren hoy mismo los consumidores cubanos a
partir de dos ejemplos expuestos por la propia prensa oficial.
En el periódico Juventud Rebelde, el segundo en importancia en Cuba,
en las ediciones del 13 y el 17 del mes corriente aparecen en la sección "Acuse
de Recibo" dos ejemplos de clientes estafados por establecimientos
comerciales recaudadores de divisas, al venderles artículos con defectos
de fabricación.
En el primer caso una señora residente en Ciego de Ávila compró
un refrigerador marca Antillano (ensamblado en la fábrica EIMPUD de Santa
Clara) al precio de 436.80 dólares, y a las 24 horas el congelador se
reveló defectuoso.
Luego de gestiones y amparada por una garantía comercial por tres años,
reparado el congelador y vuelto a romperse, la mujer espera actualmente que la
empresa suministradora reponga un nuevo equipo o la tienda donde lo compró
se lo cambie o le devuelva el dinero. Pero ni lo uno ni lo otro ni dinero. ¡Ladrones
de guante blanco!
El otro ejemplo tomado de la sección de marras del mencionado periódico
es el caso de un señor de Holguín que compró cuatro gomas
de auto por 293.80 dólares en una estación de gasolina de la
cadena Oro Negro, y antes de un año de uso las gomas quedaron inservibles
y sin garantía porque el vendedor utilizó el gancho de una falsa
garantía para mercadear. Un timo en toda regla.
Ambos casos contrastan con la pretendida falacia de la ética
socialista. Desmienten "las verdades y los principios". Revelan las
estafas cotidianas que componen "La Gran Estafa" del comunismo
tropical.
¿Cuántos casos cómo estos se producen en Cuba?
Evidentemente, el periodista oficial no analizó las causas. Solamente
le permiten dar a conocer el acuse de recibo de la correspondencia. En la prensa
oficiosa cubana, la crítica a las estafas del sistema no son permitidas.
De aquí la necesidad de la prensa independiente.
Esta información ha sido transmitida por teléfono,
ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a
Internet. CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza
la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como
fuente.
|