Prisiones
de Cuba
Recluso
protesta contra maltratos cosiéndose la boca con hilo de nylon
CIEGO DE ÁVILA, 2 de octubre (Mirley Delgado, APLA / www.cubanet.org)
- Un recluso se cosió la boca con hilo de nylon y dejó de ingerir
los pocos alimentos que recibe en la prisión provincial de Canaleta, en
protesta por los maltratos que los funcionarios de esa instalación del
Ministerio de Interior de Cuba le infligen a la población penal.
Maikel Álvarez Ruiz, confinado en el destacamento ocho, cubículo
34 de Canaleta, permaneció cinco días con la boca cosida y sin
comer para llamar la atención de los funcionarios de esa penitenciaría
sobre los maltratos que le infligen a los reclusos.
También Álvarez quiso significar con su protesta que hace dos
años lo tienen encerrado sin haberlo presentado ante un juez y sin que le
hayan celebrado juicio.
Una fuente que no será revelada por razones de seguridad confirmó
que la población penal de Canaleta permanece hacinada en locales
insalubres y cuyas características contravienen las Reglas Mínimas
para el Tratamiento de los Reclusos de la ONU, además de que la dieta que
reciben es insuficiente y no disponen de atención médica adecuada.
"Es frecuente que prisioneros se autoagredan como modo de protestar
contra estas violaciones o para matarse y así poner fin a una especie de
castigo adicional a las penas impuestas por los tribunales populares", señaló
la fuente.
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