La bolita en
Cuba: variante de la lotería nacional
Amarilis Cortina Rey, Cuba-Verdad
LA HABANA, mayo (www.cubanet.org) - Cuando apenas comienza a calentar el
sol, una pregunta familiar asalta a muchas personas en Cuba:
- ¿Tú sabes qué salió anoche?
La pregunta corre de boca en boca hasta que el júbilo de los
premiados por el sorteo de la lotería incita a otros al juego. Quien no
ganó esta vez tendrá una esperanza nueva para el próximo
sorteo.
Durante décadas el gobierno cubano ha tratado infructuosamente de
erradicar lo que calificó como "un vicio del capitalismo". Sin
embargo, durante los primeros años del actual gobierno, los billetes de
la lotería nacional fueron usados para promocionar a algunos de los mártires
que contribuyeron a instaurar el cambio en Cuba. Por ejemplo, el sorteo número
367, con fecha de abril 9 de 1966, trae la foto de Jesús M. Iglesias,
acompañada de la leyenda: "Expedicionario del Corinthia, asesinado
por la tiranía el 28 de marzo de 1957".
Al dorso de este billete, que se vendía a veinte centavos la fracción,
se informa sobre la cantidad de premios y su valor. Además, se lee: "Para
los planes económicos del gobierno revolucionario".
Posteriormente todo cambió y el gobierno cubano ha impugnado el juego
como delito por el que muchos ciudadanos cumplen y han cumplido condenas en las
cárceles del régimen. Pero los deseos de probar suerte del cubano
han sido más tentadoras que el miedo a las leyes revolucionarias.
Así es como tantas personas de edad avanzada y muchos jóvenes
se entregan de manera sistemática al juego, intentando ganarse un premio
de lotería ilegal. Pero sobre todo los jubilados son los que más
se entregan al azar con la intención de salir del bache económico
en que se encuentran sumidos debido a las precarias pensiones que reciben.
Y aunque parezca increíble, muchas familias cubanas han adquirido
objetos para su hogar y otros bienes gracias al juego de la "bolita",
que es como le llaman. Este juego, que no es más que una variante de lo
que antaño se llamaba lotería nacional, también fue
prohibido por el primer gobierno constitucional de Cuba, del presidente Tomás
Estrada Palma, y reinstaurado en julio de 1909 por otro presidente
constitucional: José Miguel Gómez. Así es como ese año
se premia el primer billete de la lotería nacional, con el número
10967.
A pesar de los obstáculos de estos tiempos el juego de la lotería
en la Isla ha cobrado fuerzas, y todos sus mecanismos, bancos, apuntadores,
funcionan de manera clandestina.
Hasta hace poco tiempo la lotería en Cuba se guiaba por la de
Venezuela, pero no se sabe -según refieren algunas fuentes relacionadas
con el medio- por qué la emisora de la hermana república dejó
de dar esa información que ahora se recibe por otras vías.
De acuerdo con algunos libros de historia, el juego de lotería se
apoderó de tal modo del país en la época republicana, que
llegó a constituirse en una de las características de la nación.
Sin embargo, todo parece indicar que pretende mantenerse, a pesar de los riesgos
a que se exponen los que en Cuba gustan de probar su buena suerte.
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