Publicado el 3 de mayo de 2002 en
El Nuevo Herald.
Muere en Madrid el escritor Jesús Díaz
Redacción de El Nuevo Herald
El escritor, periodista y cineasta cubano Jesús Díaz, fundador
y director de la revista Encuentro de la cultura cubana y una de las figuras
insoslayables de la literatura de la isla, falleció la madrugada del
jueves en Madrid a la edad de 60 años.
Díaz fue hallado muerto por su hijo, Pablo Díaz, uno de sus
colaboradores más cercanos en la revista Encuentro. El escritor tenía
programado hacer un viaje a Galicia, desde donde sus anfitriones llamaron a
Pablo preocupados porque Jesús no llegó en el vuelo previsto.
''La persona que lo estaba esperando me dijo que no había llegado, y
como desde anoche no había dado señales de vida, me temí
que algo le había pasado'', dijo a El Nuevo Herald Pablo Díaz. "Cuando
vi que la puerta tenía las llaves por dentro entré y me lo encontré
en la cama, en pijama. Por la expresión que tenía parece que no
sufrió''.
Al cierre de esta edición iban a hacerle una autopsia al cadáver
para conocer con exactitud el motivo del fallecimiento, que se supone sea un
infarto.
''La muerte es injusta'', dijo desde Tenerife el cineasta Rolando Díaz,
hermano de Jesús. "El tenía un sueño: que los cubanos
pudiéramos algún día entendernos quitando de en medio las
miserias humanas; quería que las ideas políticas dejaran de ser
una separación tan brutal como para impedirnos entendernos, porque era un
convencido de que la esencia de la cubanía está por encima de
todas esas mezquindades''.
La revista Encuentro publicaba por igual artículos de escritores
residentes en la isla y en el exilio, a favor y en contra de la política
del gobierno cubano.
''No sólo fue un novelista importante dentro de la literatura cubana,
sino el más hábil animador de la cultura cubana tan pronto como
llegó al exilio'', dijo el columnista Carlos Alberto Montaner. "Encuentro
marca una etapa muy importante en la expresión de la intelligentsia
cubana en el exterior. Hizo una cosa muy amplia, y consiguió incorporar a
mucha gente residente en la isla que tuvo el valor de publicar en una revista
profundamente odiada por el régimen''.
Con su libro Los años duros, Díaz ganó el Premio de
cuento Casa de las Américas 1966 en La Habana. Entre sus novelas figuran
Las iniciales de la tierra, Las palabras perdidas, Siberiana, La piel y la máscara
y la más reciente, Las cuatro fugas de Manuel.
Tras oír al exilio Carter va a Cuba
Rui Ferreira/El Nuevo Herald. Atlanta
A sólo días de la primera visita de un ex presidente
estadounidense a Cuba en 43 años, Jimmy Carter discutió ayer, en
medio de un infranqueable hermetismo, detalles de su viaje a la isla con líderes
del exilio y con diplomáticos del régimen de La Habana.
Una portavoz del ex mandatario dijo a El Nuevo Herald que los encuentros
eran privados, por lo cual no se revelarían detalles. ''El presidente
cree que no es apropiado conversar sobre estos encuentros. Nos hemos estado
reuniendo con todos los sectores del exilio cubano en los últimos días
y seguiremos haciéndolo'', dijo Deanna Congileo.
Durante un encuentro de poco más de 40 minutos con una delegación
de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), Carter dijo que estaba
abierto a sugerencias sobre los temas a tratar durante su visita a Cuba entre el
12 y el 15 de mayo próximos.
''Le pedimos al presidente que se reúna con los disidentes, que los
invite a su hotel, que como hombre comprometido con los derechos humanos vaya a
Cuba a abogar por la libertad y la democracia'', dijo Jorge Mas Santos, chairman
de la FNCA.
Carter manifestó sus esperanzas, agregó Mas Santos, de hacer
llegar su mensaje al pueblo cubano a traves de los medios de comunicación
de la isla. ''Tengo entendido que algunos detalles del viaje pudieran cambiar si
el presidente no tiene acceso a la prensa en Cuba'', dijo el líder de la
FNCA.
Carter también se reunió con Carlos Saladrigas, del Grupo de
Estudios sobre Cuba, quien manifestó: "Siempre me siento optimista
con este viaje, porque pienso que es importante que alguien de su estatura se
interese por Cuba''.
Además, ''es interesantísimo que se reúna con el
exilio, porque no creo que sea factible una transición en la isla sin la
participación del exilio'', dijo Saladrigas.
Por el Centro Carter también pasaron ayer dos diplomáticos de
la isla. Uno de ellos fue el agregado de prensa de la Sección de
Intereses de Cuba en Washington, Luis Fernández. El otro no fue
identificado por miembros del equipo del ex presidente. Ambos se retiraron sin
hablar con la prensa.
Según Mas Santos, el encuentro con Carter fue ''en buen espíritu''
y el ex mandatario recibió con interés la sugerencia de
interesarse por el Proyecto Varela.
''El estaba al tanto del Proyecto Varela. Creemos que es vital que diga en
La Habana cuán importante es que 10,000 cubanos arriesguen su seguridad
para demandar un plebiscito'', añadió el chairman de la FNCA.
Esta organización entregó a Carter un listado con nombres de
presos políticos con la sugerencia de que se interese por ellos y sus
familiares.
''Castro va a usar su presencia en Cuba para legitimar un fracasada revolución.
Qué mejor manera de balancear esto que legitimizar a esos hombres y
mujeres de fe y convicciones que sufren por sus creencias'', dijo la FNCA en una
carta que entregó a Carter con una serie de propuestas concretas que
incluyen donaciones a bibliotecas independientes, visitas a presos políticos,
atención a la prensa independiente en igualdad de condiciones con los demás
periodistas, oficialistas o extranjeros, e incluso le sugiere que se hospede en
una casa particular.
''La pregunta es: ¿va usted o su delegación a legitimar [el
apartheid turístico] esos abusos en Cuba?'', pregunta la misiva.
Por otro lado, en el documento, la FNCA deja clara su posición sobre
el embargo económico estadounidense a la isla.
''Apoyamos el levantamiento inmediato del embargo si el régimen
cubano toma las siguientes medidas: liberación de todos los presos políticos
y que permita el ingreso de grupos internacionales de derechos humanos a la
isla; que permita el libre flujo de información en la isla; y que
convoque elecciones libres y justas en un año, con la participación
de partidos políticos, con acceso a la prensa y monitoreadas por grupos
como el Centro Carter, las Naciones Unidas y la Organización de Estados
Americanos'', dijo la declaración.
Se ensanchan los cauces de la corrupción
Armando Soler / Cubanet. La Habana
Amigo, ¿necesita una planilla? Se la puedo facilitar por cinco dólares.
¿Y sellos del timbre? No hay lío, se los vendo con el comprobante
bancario.
Esto me propuso el joven, sonriente, mientras la temprana cola va creciendo
en el parque situado frente a las dependencias del Departamento de Inmigración
y Extranjería, en el populoso barrio de Santos Suárez, en La
Habana.
El documento al que se refiere este ''comerciante'' está en poder del
mencionado departamento del Ministerio del Interior. Los sellos del timbre y el
comprobante bancario son de exclusivo manejo del banco estatal.
Otros jóvenes merodean por el lugar con la misma propuesta a los que
arriban. He comprobado que son los mismos durante varios días.
El hecho de que puedan realizar con desenfado este ''negocio'' en las mismas
narices de un organismo famoso por el control que ejerce sobre el ciudadano,
resulta sospechoso. Sobre todo cuando el cambalache se ejecuta en dólares.
El mercado negro de documentos oficiales es un aspecto del mundo subterráneo
de la isla. La sociedad parece moverse con fluidez dentro del tráfico
ilegal de influencias y mercancías.
Son conocidos los incontables impedimentos que sufre cotidianamente el
ciudadano cubano. Son abrumadores para el que intente emigrar. Los rigen
instituciones como el Instituto de la Vivienda, el ministerio de Salud Pública,
el ministerio de Justicia. Todos participan del mismo esquema gubernamental de
controlar los pocos bienes personales que posee el cubano, incluido él
mismo.
La red de venta de influencias para lograr un procedimiento rápido y
seguro en el largo camino de la emigración tiene muchos matices. Puede
ser la venta de un certificado de antecedentes penales, un ''regalo'' para que
el expediente de vivienda sea liberado con prontitud o, por una ganga, una placa
de rayos X falsa para el certificado médico.
Esta tendencia a la ilegalidad pulula también entre los ancianos,
supuestos portadores del vetusto ideario del 59. Podemos encontrarlos vendiendo
cigarrillos sueltos o refrescos de las tiendas dolarizadas o shopping. Se les ve
perplejos y perdidos. Todo ha cambiado con el dólar en la calle. Los jóvenes
no les hacen mucho caso. Están ávidos de "verdes''.
Joaquín, empleado de una tienda de venta de divisas, tampoco escapa a
esa avidez. Día tras día compra legalmente diez cajas de cerveza
en una tienda de recuperación de divisas a 75 centavos de dólar.
Las lleva a su trabajo y allí, mezcladas con las del estado, las vende a
85.
"Imagínate --me asegura Joaquín satisfecho--, recupero el
gasto y tengo un beneficio de 25 dólares diarios. Oye, ¡ojalá
esto dure bastante!''.
Muchos buscan laborar en zonas donde circula el dólar.
El beneficio se logra muy rápido y la ilegalidad desaparece en el
vertiginoso trasiego del consumo.
Pero estas posiciones no abundan.
El espacio otorgado a la economía de mercado es muy estrecho. Muchas
plazas son vendidas a precios muy elevados. Aún así, los cupos no
alcanzan. Las personas que añoran estos beneficios son muchas.
Y exploran otros mercados.
Yoyi es un panadero de 21 años. Rodeado de polvo de harina, calza
tenis de 80 dólares. Su salario oficial es de 240 pesos, menos de nueve dólares
al cambio actual.
''Por el día vendemos el pan del estado. Por la noche, el nuestro. Así
me busco 200 ó 300 pesos al día'', me asegura Yoyi.
Cada libra de pan que se vende cuesta al consumidor 10 pesos, el equivalente
al salario diario de un profesional.
Es un claro ejemplo del crimen organizado, si aceptamos la definición
como la de un grupo de individuos que se unen para cometer delitos de manera
sistemática y para colmo, utilizando recursos estatales.
Un 'predador de la libertad de prensa'
Agence France Presse. La Habana
El gobernante cubano, Fidel Castro Ruz, fue catalogado como ''un predador de
la libertad de prensa'' en el informe anual emitido el miércoles por la
organización Reporteros Sin Fronteras (RSF), que reiteró sus críticas
al gobierno cubano por restringir la información en la isla.
El documento, que dedica más de 12 páginas a analizar la
represión contra los comunicadores independientes en Cuba, sostiene que "debido
a la grave situación en la isla, Castro es considerado por Reporteros Sin
Fronteras como uno de los predadores de la libertad de prensa en el mundo''.
Al evaluar los acontecimientos del 2001, RSF destaca que sólo un
periodista se encuentra actualmente en prisión, pero advierte que aumentó
el número de detenciones y de acciones de acoso y hostigamiento contra
quienes no acatan las reglas del gobierno comunista.
'El régimen de Fidel Castro privilegia una represión más
discreta que en el pasado, pero así y todo eficaz, contra los periodistas
independientes, a quienes considera como "contrarrevolucionarios' '',
precisa el informe.
Denuncia que esos comunicadores son víctimas de 'intercepciones de
correos, escuchas telefónicas, agresiones anónimas y 'visitas' a
domicilio'', como ''método utilizado por el gobierno para desalentarlos''
a redactar información alternativa. RSF recuerda, además, que ''el
Estado cubano dispone de un absoluto monopolio sobre la prensa y mantiene bajo
estrecha vigilancia'' a los periodistas.
Pero según RSF, la represión no sólo se dirige contra
los comunicadores cubanos, sino que también afecta a los corresponsales
de agencias extranjeras con oficinas en La Habana, quienes recibirían
presiones para atenuar sus críticas al gobierno de Castro.
El informe reseña que en marzo de 2001 el periodista británico
Pascal Fletcher, corresponsal de Reuters y del diario Financial Times, fue
objeto de ''una campaña contra su persona'' en la prensa oficial, que lo
acusó de ser ''portador de veneno contra la Revolución'' cubana y
presunto empleado del gobierno estadounidense.
Fletcher abandonó la isla dos meses después, llamado por su
oficina central para ocupar un puesto en Venezuela.
El control informativo que existe en Cuba se aplica también a la
internet, añade RSF, y afirma que los cubanos sólo tienen un
acceso ''estrictamente reglamentado'' a la red.
LA ISLA
Carta de Cuba, EFE
DELINCUENCIA/ En el municipio Candelaria, provincia de Pinar del Río,
se incrementó la delincuencia en un 18 por ciento, con una fuerte
incidencia en el hurto y sacrificio de ganado mayor. Según una
fuente oficial, la información fue revelada en una reunión del
Partido Comunista provincial, donde participó la primera secretaria del
territorio, María del Carmen Concepción, y donde se culpó
del notable incremento delictivo a la falta de acción preventiva y de
atención al control interno de la economía.
DROGAS/ Miembros de la Policía Especializada y agentes vestidos de
civil participaron en un operativo en búsqueda de droga en el municipio
de Marianao, en la capital. En la Avenida 41, una de las más céntricas
de la localidad, los agentes realizaron varios registros en casas de la zona e
interceptaron varios vehículos, de los cuales obligaron a descender a sus
ocupantes antes de inspeccionarlos. Alberto García, un vecino de
Marianao, informó que la policía estaba buscando un cargamento de
cocaína que, según los uniformados, traficantes locales pretendían
vender en los centros nocturnos y hoteles de uso exclusivo para extranjeros que
existen en esa zona.
INVERSIONES/ El grupo español Pescanova abrirá en un plazo de
dos meses dos nuevas granjas de cultivo de langostino salvaje en Cuba, en las
que prevé producir en los próximos años entre 3,000 y 5,000
toneladas al año de esta especie. La firma facilitó ayer
estos datos durante la visita que el ministro de Pesca de Cuba, Alfredo López,
hizo a las instalaciones que Pescanova tiene en la localidad gallega de Chapela,
en Pontevedra. |