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Marzo 5, 2002



Noticias de Cuba - Cuba Nueva

Cuba Nueva. Vespertino electrónico independiente de Cuba, editado en el exilio, en Barcelona. Año 3 - Segunda edición de martes, 05 de marzo de 2002

Cuba no respeta los derechos humanos ni civiles, disidentes

La Habana, 5 marzo (Cubanueva.com) .- El gobierno cubano ha comenzado su campaña de propaganda y su ofensiva diplomática par evitar que la Comisión de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra vuelva este año a condenar a la isla por la violación de los derechos humanos.

El lunes el órgano oficial del Partido Comunista de Cuba embistió contra Estados Unidos haciendo pública una nota de protesta de la misión de Cuba ante la ONU por la "guerra sucia" de Washington para conseguir otro voto de condena a la situación en la isla, que será estudiada en las próximas semanas por la Comisión de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra.

Hasta ahora Cuba ha tratado de llevar siempre al "plano diplomático" la condena de las violaciones de los derechos humanos de Naciones Unidas a la isla, argumentando que todo es una "maniobra yanqui".

Al mismo tiempo que La Habana continúa tratando de que se vea la violación de los derechos humanos y cívicos en el país, como una cuestión diplomática y de "juego sucio de Estados Unidos", la disidencia cubana en un documento titulado "Todos Unidos", firmado por 81 dirigentes de organizaciones opositoras que operan en forma ilegal pero tolerada en la isla, unieron sus voces para "exigir respeto a la dignidad del pueblo cubano".

El documento denuncia al régimen de Castro de transgedir los derechos de sus ciudadanos y exhorta a promover su condena en la próxima sesión de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU.

"El gobierno de Cuba no sólo transgrede todos los derechos civiles, políticos y económicos de los ciudadanos, sino que ha instalado un orden que le niega a las personas la posibilidad de vivir ejerciendo esos derechos y otros derechos universalmente reconocidos", señalan los opositores.

"Aunque nos persiguen y tratan de silenciarnos y dividirnos mediante la represión y diversas maniobras, seguimos unidos y determinados a lograr los cambios pacíficos hacia la democracia y la reconciliación nacional", escribieron los 81 disidentes, incluídos algunos moderados como Elizardo Sánchez y Oswaldo Payá.

"El gobierno de Cuba, ante el mundo, no admite la existencia del problema y no muestra la necesaria voluntad para superarlo. Ante los cubanos, ni siquiera reconoce la existencia de esos derechos, ni se compromete a respetarlos", añade el comunicado.

La Comisión de DDHH de Ginebra aprobó el año pasado con 22 votos a favor, 20 en contra y 10 abstenciones, la moción que condenó al gobierno de Castro, al que se le recomendaba democratizar el sistema político vigente en la isla y respetar los derechos humanos de sus ciudadanos.

En esa ocasión, Argentina, Costa Rica, Guatemala y Uruguay apoyaron la resolución; Cuba y Venezuela se opusieron y Brasil, Colombia, Ecuador, México y Perú, se abstuvieron.

Ayer el propio gobierno estadounidense publicó su informe anual sobre Derechos Humanos en el que critica fuertemente al régimen totalitario de Fidel Castro por "violar sistemáticamente los derechos políticos y civiles fundamentales de sus ciudadanos". El informe de 26 páginas comienza señalando que "Cuba es un estado totalitario controlado por el presidente Fidel Castro" y recopila denuncias sobre la situación en la isla

Entre otras cosas, señaló denuncias sobre muertes de algunos presos debido a la falta de asistencia medica, los golpes y otros abusos a prisioneros incluídos activistas de derechos humanos, la impunidad de los abusos de las fuerzas de seguridad, las duras condiciones en las cárceles, las amenazas y arrestos de disidentes y la falta de libertad de expresión y movimiento.

Incendio en fábrica de bicicletas cubana deja cuantiosos daños materiales

LA HABANA, Mar 5 (AFP) - Un incendio ocurrido la víspera en la planta ensambladora de bicicletas "Claudio Argüelles" de La Habana, provoncó grandes pérdidas materiales, aunque no causó víctimas, afirmaron este martes medios de prensa locales.

El siniestro comenzó a las 18H50 (23H50 GMT) en la carpintería y, favorecido por fuertes vientos, se extendió al área de productos en proceso, afectando unos 1.000 metros cuadrados "y se produjeron también cuantisos daños materiales que aún estan por determinar", dijo el diario Granma.

La rápida intervención del cuerpo de bomberos, 18 carros cisternas, permitió que el incendio fuera sofocado en dos horas, indicaron las fuentes.

Cubanos deben sortear un laberinto burocrático para salir del país

LA HABANA, Mar 1 (AFP) - Viajar constituye un problema para los cubanos, un hecho que quedó expuesto con el asalto realizado por un grupo de personas a la embajada de México en La Habana, pues pisar la escalerilla del avión es una difícil meta que debe sortear un laberinto burocrático impuesto por Cuba y la rigidez de otros países para conceder visas a los isleños, entre otros obstáculos.

Algunas cifras pueden ilustrar la situación. Con una población actual de 11,2 millones de habitantes, Cuba tiene una comunidad en el exterior de 1,5 millones (13,3%), unos 800.000 quieren emigrar -según académicos locales- y una cifra no precisada desea trabajar un tiempo en el exterior para mejorar su situación económica.

Aunque cientos de miles de cubanos viajan al exterior cada año y retornan a la isla, otros miles esperan estos viajes para "quedarse" y buscar otros horizontes fuera de Cuba, país que enfrenta una crítica situación económica.

Unas 2.300 personas aprovecharon una escala en el aeropuerto madrileño de Barajas para solicitar asilo en España el año pasado, según cifras divulgadas en ese país, lo que marca un promedio de 45 cubanos por semana que abandonaron la isla para permanecer en aquel destino.

Una cantidad no precisada ha muerto en el mar, intentando atravesar el estrecho de La Florida -un espacio marítimo infectado de tiburones- en precarias embarcaciones (balsas) o en atestadas lanchas rápidas de traficantes de personas.

Funcionarios estadounidenses y sectores anticastristas del exilio en Miami, señalan que esta fiebre migratoria se debe a la falta de libertades políticas y a las serias dificultades económicas en la isla.

En Cuba, los partidarios de Fidel Castro reconocen el peso de los problemas económicos y las dificultades de la vida cotidiana, pero también culpan al "bombardeo" informativo de emisoras anticastristas como Radio Martí, la difusión del "sueño americano" y el estímulo que representa la Ley de Ajuste Cubano, que privilegia a los cubanos con una residencia automática en Estados Unidos.

La tendencia migratoria se agudizó en la década pasada, cuando la isla se sumergió en una fuerte crisis económica tras la desaparición de la Unión Soviética y los efectos del embargo norteamericano, que provocó un fuerte deterioro del nivel de vida de la gente.

Para viajar por su cuenta, un cubano precisa en primer lugar una suma considerable en dólares para cubrir los trámites migratorios internos y el pasaje. Los que no reciben remesas de sus familiares o amigos en el exterior, no pueden ni pensar en viajar.

A ello se agrega la necesidad de presentar una carta de invitación extendida por un amigo o pariente residente fuera del país, dando fe legal de que asume los gastos de estancia del invitado. La legalización de esa carta tiene un costo promedio de 200 dólares.

Tras hacer largas filas en las oficinas de migración, los cubanos deben solicitar el pasaporte y el permiso de salida del país, negado este último a ex militares y otras personas que hubieran tenido acceso a información considerada estratégica por las autoridades.

Luego de reunir estas condiciones, el aspirante a trasladarse al extranjero debe obtener una autorización de su centro laboral para poder viajar y, sólo entonces, puede solicitar una visa a la embajada correspondiente, cuyo funcionario consular tratará de escudriñar si no es un potencial emigrante ilegal.

Suman miles las visas denegadas anualmente por Estados Unidos, España, Canadá y otros países. Estados Unidos sólo concede 20.000 visas anuales para atender una demanda de cientos de miles de cubanos interesados en emigrar a ese país.

Muchos de los repatriados en virtud de los acuerdos migratorios entre Washington y La Habana (1994-95) declaran a su regreso que optaron por la precaria y peligrosa vía marítima para salir de la isla porque sus solicitudes de viaje fueron rechazadas por la Oficina de Intereses de Estados Unidos en La Habana.

Los afortunados en tener la visa y el permiso de salida, deben comprar el pasaje en dólares y volver a hacer "la cola" en la oficina de emigración para obtener un sello final, que les permitirá poner los pies en la anhelada escalerilla de un avión.

Algunos jóvenes, sobre todo mujeres, han descubierto una fórmula migratoria que derrumba las negativas burocráticas de los consulados extranjeros: casarse con un extranjero o extranjera, para emigrar como conyúge de un matrimonio que la mayoría de las veces termina en separación a los pocos meses.

Los que viajan y regresan también se quejan de que en cada casilla migratoria que pasaron por el mundo, fueron mirados y tratados como si en el fondo de su alma llevaran escondido un "balsero".

Ginebra: Cuba Condenada por los cubanos de la Isla

Jorge Hernández Fonseca / Cubanueva.com

El dictador cubano Fidel Castro no acaba de salir del maratón de reuniones anti norteamericanas convocadas por Cuba con vistas a discutir la estrategia para oponerse a los Estados Unidos en América Latina. Comenzando con la reunión contra el ALCA de Noviembre del 2001, que se continuó con la del Foro de San Pablo en Diciembre del propio año, la que se empató con la de los partidos comunistas de América Latina en Montevideo Uruguay - en Enero 2002 - que dio pase para el Foro Social Mundial de Porto Alegre, en Febrero del 2002, el que se remató con la reunión de economistas comunistas en la Habana, a mediados de Febrero del 2002; cinco reuniones seguidas en tres meses, todas ellas clausuradas con largos discursos y comunicados contra la política norteamericana, incluyendo llamados a la lucha con planos de acción, beligerancia y combate. ¿Y los Estados Unidos que?; ¿piensa Fidel Castro que no tiene derecho a defenderse?.

Todas las reuniones tenían como punto principal el coordinar acciones para la lucha contra los "yankees" en América Latina y la prensa cubana las reportó ejemplarmente, dando profusión de detalles anti imperialistas, cargados de mensajes públicos y discursos anti norteamericanos; para el dictador cubano, él estaba en el derecho de conspirar contra Norteamérica, incluso en el ámbito internacional.

Paralelamente - como Chile, Venezuela, Colombia y Brasil saben - el dictador cubano convocó también guerrilleros de la izquierda chilena, venezolana y colombiana a la Habana - para bajo su protección - darles algunas "tareas especializadas", de manera de poder secuestrar empresarios para financiar la lucha armada contra "el imperialismo" en América del Sur y definir el tipo de armas que Cuba enviaría a Venezuela clandestinamente; de esta manera - menos pública pero más efectiva - Cuba envió a Colombia al representante del IRA irlandés en la isla, para enseñar a los guerrilleros colombianos como hacer una nueva bomba más efectiva y mortífera, al tiempo que comenzó el suministro clandestino de armas cubanas a Venezuela, mientras mandaba un comando chileno a Brasil - oculto por Cuba durante años - para procurar dinero para "la revolución", secuestrando un empresario brasileño por el que los "revolucionarios" pedían nada más y nada menos que 10 millones de dólares. ¿Y los Estados Unidos que?; ¿continuarían tranquilos, o comenzarían a despertar?.

Como si no le bastara, el dictador cubano, además de conspirar contra los norteamericanos en sucesivas reuniones internacionales, de trabajar en el plano clandestino con guerrilleros y terroristas de países con los que mantiene hipócritas relaciones diplomáticas, manda a sacar por la fuerza, de dentro de una embajada extranjera, 21 cubanos que buscaron amparo diplomático, mandando a apalear a todos los que se acercaban, aunque fueran simples periodistas cumpliendo su deber. Es decir, se enemista adicionalmente con su propio pueblo, dando una nueva vuelta en su torniquete.

En un país que existen dos varas para medir y un tejado de vidrio de proporciones amazónicas, el dictador cubano se rasga las vestiduras ahora, después de sus conspiraciones en las cinco reuniones de los últimos tres meses y lanza opúsculos incendiarios contra "los americanos"; ¿pecado?, ellos hicieron una reunión parecida a la que Fidel Castro se ha cansado de convocar en su país e invitaron a un grupo de diplomáticos a un desayuno de trabajo, para mostrarles - si es que esto fuera necesario - las pruebas del porque deberían coordinar acciones para condenar a Cuba en Ginebra por la violación de los derechos humanos en la isla; lástima que el desayuno no era abierto, sino se hubiera llenado de cubanos - igual que se llenó la embajada de México días atrás - pero no para opinar, sino para tomar desayuno, que en Cuba no hay.

La prensa comunista, de la misma manera que publica la política oficial cubana de oponerse con todas sus fuerzas (las pocas que le quedan) a los norteamericanos, ahora no quieren que "los yankees" les respondan al mismo nivel y preparen "las cosas" para la reunión de Ginebra; publican en Granma comunicados indignados por la respuesta norteamericana a las conspiraciones de la Habana, solamente para ser leídos por "sus amigos", que son parte de la conspiración, porque fueron a las reuniones de la Habana a comer bocaditos de jamón y queso con cerveza, pagada por el dictador en el palacio de las convenciones.

Pero la cosa no queda ahí; 81 disidentes cubanos, todos residentes actualmente en Cuba, han escrito una declaración titulada "Todos Unidos", donde exponen su posición - no la del gobierno norteamericano, sino la de cubanos residentes en Cuba - pidiéndole a la comunidad internacional que la isla sea condenada en Ginebra como violadora de los Derechos Humanos; es la posición del pueblo cubano - no ya del exilio, que pide anualmente la condena en Ginebra - es la de los cubanos residente en la isla, pidiendo a los países del mundo en Ginebra para que condenen a la dictadura cubana por sus reiteradas violaciones de los Derechos Fundamentales dentro de Cuba.

¿Que va decir Granma mañana?; ya no es un desayuno convocado por representantes diplomáticos norteamericanos que se defienden de las conspiraciones cubanas, ahora es "una mañana sin café" que tendrá que "no" tomarse el régimen cubano, convocado por el propio pueblo cubano, hablando a través de nada menos que 81 dignos y valientes representantes que viven dentro de la isla y como tales pueden dar fe de los desmanes de la tiranía cubana.

Lo que debería hacer el periódico Granma es preguntarle a la policía política cubana donde están los jóvenes que sacaron a la fuerza de la embajada de México y entrevistar a alguno de los centenares de cubanos - entre ellos a dos periodistas extranjeros -apaleados en las calles cercanas a la embajada por el delito de pasar por las cercanías.

A Ginebra, Granma debe mandar periodistas, porque los representantes de los cubanos de la isla firmantes de "Todos Unidos", estarán representados. Allá nos vemos, si llegan a Abril, porque les queda poco.

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