Intolerancia
y tolerancia
Reinaldo Cosano Alén
LA HABANA, junio (www.cubanet.org) - Una sabia rectificación ordenada
por la Corte Suprema de Estados Unidos de América ocurrida recientemente
me hizo reflexionar una vez más, al relacionarla con el caso cubano. ¡A
qué sofocantes extremos ha conducido el régimen castrista a la
nación cubana! Dos "sencillos" ejemplos nos lo demuestran.
De uno de ellos ya comentamos a través de www.cubanet.org. Fue la
inauguración de la Logia No-88 de la rama de las Rebecas de la Gran Logia
Oddfellows Independiente de Cuba el 29 de abril en Las Tunas, tras un largo
batallar legal en que se gastaron diez años hasta lograr la autorización
del Ministerio de Justicia.
De la otra muestra de ridícula intolerancia conocimos hace poco,
también referente a logias fraternales.
Las logias Caballero de la Luz, de Regla y Guanabacoa, en la capital,
decidieron ofrecer un homenaje de recordación patriótica a José
Martí, el prócer mayor de nuestras contiendas independentistas y
libertarias, el 19 de mayo, fecha de su caída en combate. En gesto muy
hermoso invitaron a todas las otras logias de ambas localidades. El homenaje
contemplaba efectuar una marcha conjunta de unas doce cuadras, desde la logia
Hermano Pedro Somallán hasta el busto de Martí ubicado en el
parque que lleva su nombre en Regla.
El permiso para el desfile lo solicitaron a las autoridades policiacas con
tres meses de antelación, pero se lo concedieron el día antes y
con categórica limitación de que el desfile podrían
efectuarlo sólo desde unos 50 metros del busto de Martí. Hubo que
cumplir la ordenanza.
Magdalena Vélez, miembro de una de las asociaciones fraternales
participantes en la marcha, comentó: "Es un verdadero ridículo
motivado por el miedo a que ganemos la calle. Resultó un acto patriótico
muy bonito y por primera vez en no sé cuántos años nos
congregamos unos cien hermanos. Como por casi 43 años las logias han
tenido que efectuar todas sus actividades enclaustrados, sean rituales o no lo
sean, esto explica el por qué de una gran cantidad de conciudadanos nos
miraban con gran admiración y respeto. También con gran curiosidad
por nuestros atuendos: delantales, collarines, la ofrenda floral. Desde el
triunfo del castrismo no se había vuelto a ver un espectáculo
semejante. Fue mucha la curiosidad. Hecho de la pujante sociedad civil".
Como ejemplo de importante victoria de tolerancia, prudencia y democracia,
en perfecto contraste con los casos recién expuestos, puede considerarse
la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos de América que
permite a las organizaciones religiosas reunirse en instalaciones de las
escuelas públicas si los distritos conceden este derecho a otros grupos.
La sentencia de la Corte Suprema rectificó el dictamen de la Corte de
Apelaciones, que había prohibido a un grupo religioso evangélico
juvenil utilizar los predios de una institución estatal escolar para sus
estudios bíblicos, mientras funcionarios de las escuelas lo permitían
a otros grupos de la comunidad. Poderoso mensaje a tener en cuenta en una nueva
Cuba, sin castrismo.
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