¿Dónde
está la sal?
Juan Carlos Herrera Acosta, APLO
GUANTANAMO, julio (www.cubanet.org) - ¿Dónde está la sal?
Es una de las preguntas que se hacen los guantanameros -y tal vez todos los
cubanos- durante todo el año, ante la escasez del principal sazonador de
la poca comida que adorna la mesa del ciudadano.
Guantánamo posee varias salinas en explotación: Glorieta,
Baitiquirí, Joa y Caimanera, ésta última la mayor y más
moderna. Estas salinas son explotadas al máximo, tanto para el consumo
nacional como para la exportación. Pero la calidad de la sal que se
produce en las salinas varían considerablemente, y no son pocos los isleños
que han perdido un diente al tropezar su dentadura con un pedruzco camuflado en
una medida de sal. Por supuesto, la que se consume nacionalmente no es yodada y
llega a los centros de distribución con grandes gránulos.
Parece extraño, pero no lo es. En Guántamo se encuentran las
salinas más importantes del país. Sin embargo, los guantanameros
se ven obligados a acudir al mercado negro para resolver sus necesidades de sal.
Los ciudadanos de la provincia no entienden. ¿Será el embargo
norteamericano el culpable de esta paradoja?
Pero lo mismo sucede con otros alimentos. Y es un viejo mal. Somos un país
agrícola y casi nunca vemos productos tradicionales del campo: yuca, maíz,
calabaza, boniato, malanga, papa. Y para colmo de males nuestro producto
insignia, el azúcar, debemos buscarlo también en el mercado negro.
La sal no es más que uno de los tantos agregados al renglón de
productos desaparecidos.
Para muchos guantanameros nada de esto tiene explicación. El mar está
ahí, y las fértiles tierras de Cuba también. No se los ha
llevado el "bloqueo".
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