Sin yogurt de
soya El Martillo hace meses porque "no hay combustible"
CABAÑAS, 5 de julio (Moisés Rodríguez Valdés,
Grupo Decoro /www.cubanet.org) - No le venden la cuota de yogurt de soya a los
niños de El Martillo, comunidad rural ubicada en el municipio Mariel de
provincia La Habana, porque los funcionarios a cargo de solucionar el problema
alegan que "no hay combustible" para el carro-cisterna que traslada
ese alimento.
El problema hace meses que no se soluciona a pesar de las reiteradas quejas
de los residentes de la zona en las asambleas de base del Poder Popular.
Pero lo peor es que nada indica que los funcionarios locales estén en
capacidad de resolverlo, pues Regla, la delegada de la circunscripción 35
del Poder Popular de Cabañas recientemente declaró: "No hay
combustible para que la pipa (como popularmente llaman a los carros-cisternas)
llegue hasta la tienda de El Martillo".
Ante la proclamación de la incapacidad por parte de esta funcionaria,
algunos residentes de El Martillo escribieron una queja al jefe de Estado Fidel
Castro.
La respuesta a esta queja, fechada el 29 de abril de 2002 y firmada por el
jefe del Departamento de Atención a la Población del Consejo de
Estado, René Montes de Oca, le indica a los demandantes que presenten su
queja en las asambleas de rendición de cuentas del Poder Popular si no lo
habían hecho (lo cual ya han hecho sin ningún resultado práctico)
o que se dirijan al Departamento de Atención a la Población del
gobierno municipal.
Un grupo de habitantes de El Martillo se prepara para cumplir la indicación
del Consejo de Estado presentándose en esas oficinas.
El yogurt de soya es el sustituto de la leche fresca para los niños
con edades entre 7 y 14 años, pues una disposición gubernamental
priva de la leche a los menores cuando arriban a su séptimo aniversario.
La cuota que el Estado cubano le asigna a estos niños es de cuatro litros
de yogurt de soya por semana. El costo es de un peso por litro.
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