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Los caza
turistas
Moisés Leonardo Rodríguez Valdés, Grupo Decoro
CABAÑAS, diciembre (www.cubanet.org) - Generalmente son varones jóvenes
lo que ejercen este nuevo "oficio". Se ubican en distintos lugares de
las vías que atraviesan los pueblos, con preferencia en las zonas donde
las regulaciones del tránsito obligan a los vehículos a aminorar o
detener su marcha.
¿Su objetivo? Brindarse como guías a los turistas que desean
acceder a servicios gastronómicos o alojarse en algún sitio, o
simplemente descansar un rato antes de proseguir viaje.
Cuando avizoran posibles presas, se acercan a los viajeros en vehículos
automotores o bicicletas, después de cerciorarse de la ausencia de policías.
Con unos cuantos vocablos -Food, lunch, rooms- pero siempre con muchos
gestos comunican su oferta. "La mayoría de las veces son entendidas,
pero muy pocas aceptadas", explica Carlos, uno de los cazadores de
turistas.
Si la propuesta es aceptada, se conducirá al turista al sitio que
desea, generalmente clandestino, donde podrá satisfacer sus necesidades.
"Esporádicamente nos invitan a compartir y, ¡ya tú
sabes!, nos ponemos las botas comiendo y bebiendo como rara vez le es posible a
un hijo de cubano".
Concluida la gestión los "caza turistas" reciben una comisión
de los trabajadores-dueños de cafeterías y habitaciones.
Querol, compañero de trabajo de Carlos, señala: "Aunque
pocas, no faltan las veces en que los extranjeros nos hacen algún
presente y hasta nos dejan caer una 'tierrita'".
En otros pueblos de provincia Habana donde se les ha visto actuar trabajan
en pareja. Es consenso, entre los que ejercen este trabajo, la fidelidad a
ciertas normas éticas: las ofertas de drogas y sexo están
excluidas absolutamente. En unos casos, explicó Querol, aplican esta
norma por convicción; en otros para evitar que se les impida cumplir con
sus funciones por caer en "ilegalidades mayores".
Ciudadanos conocedores del nuevo "oficio" coinciden en que se
trata de una muestra de lo benéfico que sería el efecto
multiplicador del capital que ingresa al país por vía del turismo
si el gobierno permitiera el desarrollo de la iniciativa privada, que como se ha
visto, a todos conviene y a nadie daña.
Esta información ha sido transmitida por teléfono,
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