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¡Ay,
Jalisco, no te rajes!
Rafael Ferro, Grupo de Trabajo Decoro
PINAR DEL RIO, diciembre (www.cubanet.org).- ... en Jalisco se quiere a las
buenas / porque es peligroso querer a las malas..
Pero los cubanos integrantes de la delegación oficial invitada a la
Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) hicieron oídos sordos
al principal estribillo de la conocida canción ranchera. Llegaron a la
tierra de Jorge Negrete queriendo a las malas, y de qué manera.
El colmo de la intolerancia y el extremismo fue escenificado por los
enviados del gobierno cubano, recién inaugurada la feria. La comparsa de
la demagogia se inició en medio del lanzamiento de la revista "Letras
Libres". La temática de la revista, referida a un posible y
necesario cambio en Cuba, fue el detonante de la explosión.
Un grupo perteneciente a la comitiva cubana y otros jóvenes
latinoamericanos, interrumpió continuadamente al conocido escritor
exiliado Rafael Rojas, que hacía uso de la palabra. Obviando las más
elementales normas de la ética, el grupo dejó escuchar sus
alaridos de protestas y arengas programadas que no venían al caso. Fue la
evidencia palpable de lo que viven y sufren en la Isla los que piensan diferente
a lo decretado por el gobierno.
Las autoridades de la feria tuvieron la feliz idea de dedicar el evento de
este año a Cuba. Pero obviaron al parecer la situación que se vive
en la isla, y no dictaron reglas. No exigieron a las autoridades cubanas
igualdad de condiciones y derechos a los intelectuales de la diáspora y a
los que residen en Cuba cuyas obras prohíben los que mandan.
A nadie sorprende la conducta de la delegación cubana en la Feria
Internacional del Libro en el estado de Jalisco. Desde que Cuba fue invitada
como la homenajeada, ya se avizoraba el manejo político tramado por Fidel
Castro y sus incondicionales seguidores.
Los directivos de la feria debieron tener en cuenta a escritores de adentro
y fuera de la isla. A los que escribe sobre la realidad cubana asumiendo riesgos
por decir verdades. A los que son leídos en la clandestinidad más
absoluta cuando sus obras prohibidas son editadas en el extranjero.
En Jalisco, las autoridades de la feria mordieron de manera inocente el
anzuelo tirado por el régimen cubano. De nada sirvió, al parecer,
la reciente revelación hecha por el empecinado mandatario cubano de una
conversación privada entre él y el presidente Vicente Fox, que
mostró la más bochornosa y vergonzante falta de ética
presidencial.
Los gobernantes del estado de Jalisco han de estar alertas ante la
estrategia castrista a la española. Conociendo el total rechazo que el
gobierno de Aznar hace al totalitarismo cubano, el señor Castro inició
la estrategia de congraciarse con los territorios autónomos de España.
Nada más parecido a lo que está iniciando en México, y
puede que Jalisco sea el botón de muestra.
La delegación cubana a la Feria Internacional del Libro de
Guadalajara rompió con una ola de intolerancia todas las expectativas. Lo
que pudo ser un encuentro de avance para futuros diálogos de arreglo enseñó
al mundo que el gobierno cubano sigue empecinado en censurar el pensamiento
ajeno.
A los que sueñan con una Cuba verdaderamente libre sólo les
queda recordar con nostalgia la vieja canción popularizada por Jorge
Negrete. Entonándola desde el interior, como un grito de advertencia y
esperanza:
¡Ay, Jalisco, no te rajes!
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