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Siguen
maltratando a activista ciego encarcelado
LA HABANA, 5 de diciembre (Reinaldo Cosano Alén / www.cubanet.org) -
Funcionarios del penal de Pedernales, ubicado en la provincia Holguín,
conjuntamente con oficiales de la policía política, siguen
maltratando al activista ciego Juan Carlos González Leiva, encarcelado
desde el 4 de marzo del presente año sin que aún lo hayan juzgado.
La madre del invidente fue interceptada por el jefe de la prisión, al
que llaman Sagúo, y otro oficial de apellido Urgellés, quienes le
exigieron a la mujer que les entregara un recipiente con caldo que ella prepara
cada día para su hijo, y que le permiten pasárselo en el penal
porque González realiza un ayuno de alimentos sólidos hace más
de un mes, en protesta por el arbitrario encierro a que lo tienen sometido.
Según los oficiales, ellos le iban a entregar el alimento a González
y también le pidieron a la mujer que les dijera con qué elaboraba
el caldo. La madre del invidente se negó a ello diciéndole a los
funcionarios que ella no traicionaba a su hijo.
La noticia fue confirmada por la esposa de González, Maritza Calderín,
quien agregó que el activista, al conocer lo que sucedió con su
madre, dijo: "Creo que quieren fortificar mi alimentación o
introducir alguna sustancia para alterar más mis nervios y presión
arterial. Además, me insisten en que beba leche y malta. Esto es para que
abandone el ayuno".
Calderín apuntó que a González no le han entregado la máquina
de escribir en Braille, por lo que tiene que escribir con una regleta y un punzón
que casi no tiene punta, lo que implica mucho sacrificio de su parte para
realizar esa operación.
"Cuando el registro (de la policía política) en nuestra
casa le robaron su grabadora. No la han devuelto y dicen (los oficiales) que no
lo harán porque la utilizaba para hacer entrevistas a opositores. ¡Son
unos canallas! Le tuve que comprar otra, que sí la dejaron pasar, para
que escuche sus cassettes con grabaciones de pasajes bíblicos. Hay mucha
ignorancia sobre la vida de los ciegos. Para un ciego es imprescindible tomar
notas con una grabadora. Sus carceleros deben saberlo. Todas estas son formas, más
o menos sutiles, de torurarlo".
La señora Calderín reveló que las autoridades
permitieron el bautizo de González, como era su deseo. "Lo llevaron
a una presa próxima, nombrada Mayabe. El pastor Eduardo Ray, de la
Convención Bautista Oriental, lo bautizó. Por inmersión,
como acostumbran. El pastor estaba nervioso. Parece que temía alguna
represión futura por la asistencia cristiana a Juan Carlos, pero nos dijo
firmemente: 'No puedo dejar de bautizarlo'. Descubrí que los agentes del
gobierno lo estaban filmando todo con una cámara oculta en un auto. Querían
que yo no lo supiera. ¡Pero Dios siempre pone un ojo al ciego! Esta vez el
ojo fui yo. Pobre Juan Carlos, no se entera de muchas cosas contra él.
Además, está tan flaquito, tan desnutrido", dijo la mujer.
De acuerdo a lo expuesto por Calderín, ahora al invidente lo tienen
encerrado en una celda sin ventanas, a la cual no llega el sol.
La organización Mujeres Anti Represión (MAR por Cuba), entre
otras, trataron de llamar la atención de los mandatarios que se reunieron
en la XII Cumbre Iberoamericana que tuvo lugar en República Dominicana
sobre el caso de Juan Carlos González Leiva y los demás
encarcelados por causas políticas.
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