El Nuevo
Herald. Diciembre 4, 2002
Médicos temen ser repatriados
Wilfredo Cancio Isla . El Nuevo Herald
Tres médicos cubanos que escaparon de la isla en un grupo de 35
personas interceptado por las autoridades estadounidenses, permanecían
anoche retenidos a bordo de un escapavías del Servicio Guardacostas bajo
el temor de ser repatriados.
Mientras familiares de Miami respaldados por los congresistas
cubanoamericanos gestionaban intensamente el martes la concesión del
estatus de refugiados políticos para los detenidos, la fiscalía
federal encausó a tres hombres bajo acusaciones de transportar al grupo
en un operativo de tráfico humano desde las costas de Pinar del Río.
Los tres acusados --residentes de Miami-Dade-- se nombran Edel González,
Israel Pacheco y Gerardo Izquierdo, y fueron presentados ayer ante un magistrado
en el tribunal federal de Cayo Hueso.
En cartas enviadas al Departamento de Justicia y al Servicio de Inmigración
y Naturalización (INS), los representantes Ileana Ros-Lehtinen y Lincoln
Díaz-Balart solicitaron un tratamiento diferenciado del caso, atendiendo
a la presencia de los tres profesionales de la salud, algunos con vínculos
en las fuerzas armadas de Cuba.
De acuerdo con los informes de familiares, en el grupo interceptado el
pasado sábado se encuentra el matrimonio de los doctores Yanet García,
de 33 años, y Juan Carlos González, de 36, y el hijo de ambos,
Juan Carlos, de 5. García laboraba en el Hospital Hermanos Ameijeiras,
donde realizaba su especialidad en anatomía patológica. González
era biólogo en el Instituto de Cardiología de La Habana.
''Ellos han tenido que salir por esta vía porque a los médicos
no se les permite emigrar sin antes imponerles un castigo de cinco años'',
manifestó María Fernández, madre de Yanet. "Si los
devuelven a Cuba sería condenarlos a vivir en un encierro prolongado''.
Fernández y su esposo Luis García, coronel retirado de las
Fuerzas Armadas de Cuba (FAR), llegaron a Miami hace ocho meses tras viajar a un
tercer país y penetrar a Estados Unidos por la frontera mexicana.
En entrevistas con agentes del Servicio Guardacostas, Yanet confesó
haber pagado $8,000 para que los acusados la trajeran con su familia hasta las
costas de Florida.
El tercer médico retenido en el escampavías es Girat Yáñez
Ramos, de 35 años, un cirujano traumatólogo con grado de capitán
de las FAR. Yáñez, quien trabajó en el Hospital Naval de La
Habana, había sido trasladado a otra institución hospitalaria tras
solicitar su baja del ejército.
'Mi hijo solicitó su baja de las FAR por no querer colaborar más
con el sistema, porque piensa y no quiere seguir aplaudiendo, y eso es un
conflicto en Cuba', relató Eugenio Yáñez, quien llegó
a Estados Unidos en 1993 como asilado político. "Si lo regresan, a él
pueden encausarlo por deserción''.
El grupo --18 hombres, 10 mujeres y 7 niños-- fue interceptado la
noche del sábado a bordo de una embarcación de 31 pies de eslora,
a 14 millas de Dry Tortugas, luego de que el Servicio Guardacostas recibiera una
advertencia de las autoridades guardafronteras de Cuba.
Según la declaración jurada del agente especial Verne
Eastwood, la captura de los inmigrantes se produjo luego de una persecución
prolongada, que terminó cuando la embarcación en fuga confrontó
problemas con su motor.
Los presuntos contrabandistas intentaron abastecerse de combustible mientras
embestían la embarcación de los guardacostas, que lanzaron al mar
un bote inflable en auxilio de los pasajeros.
Ottawa ''descongela'' vínculos con la isla
Efe. Toronto
Canadá decidió ''descongelar'' las relaciones políticas
con Cuba y en los próximos meses aumentará el ritmo y nivel de sus
encuentros con funcionarios cubanos, dijo el secretario de Estado canadiense
para Latinoamérica, Denis Paradis.
Paradis visitó la isla caribeña a principios de noviembre para
asistir a la Feria Internacional de La Habana, lo que supuso la primera visita
de un funcionario canadiense de alto nivel a Cuba desde que, en 1999, Ottawa
decidió ''poner hielo'' a su relación con el régimen cubano
por las condenas a prisión de cuatro disidentes.
En declaraciones a EFE, Paradis señaló que "ahora que los
cuatro disidentes han sido liberados, hemos decidido que sería bueno
reiniciar el diálogo y descongelar las relaciones políticas con
Cuba''.
Durante su viaje a Cuba, Paradis -quien viajó acompañado por
un grupo de empresarios que representaban a cerca de cien compañías
que están haciendo negocios en el país- sostuvo una serie de
entrevistas de alto nivel con ministros del gobierno cubano, así como "con
un grupo de disidentes al final del viaje''.
Paradis destacó la importancia de Canadá en la economía
de Cuba, así como la utilidad de las relaciones económicas para
fomentar el diálogo político, una tesis que Ottawa ha defendido
ante Estados Unidos desde hace más de una década.
''Los canadienses constituyen la primera nacionalidad en número de
visitantes a Cuba. Este año van a viajar a Cuba cerca de 400,000 turistas
canadienses. Y Canadá es el segundo país inversor después
de España'', dijo Paradis.
Paradis pasó buena parte de su viaje tratando temas económicos
aunque dijo que discutió también asuntos relacionados con los
derechos humanos y la democracia "con casi todos los interlocutores cubanos
con los que me reuní''.
''Creemos que los valores canadienses -como democracia, derechos humanos,
buen gobierno- se tienen que presionar de variadas formas y una de esas formas
es el comercio, porque tener comercio significa tener un diálogo'', dijo
Paradis. |