Crisis en
Sagua de Tánamo: escasean los alimentos y el combustible
HOLGUÍN, 2 de agosto (Juan Carlos Garcell, APLO / www.cubanet.org) -
Aumenta la escasez de alimentos y combustible en el municipio Sagua de Tánamo,
en la provincia cubana Holguín, por lo que los residentes de esta región
de Cuba no sólo se perjudican física sino también
mentalmente, al no poder satisfacer sus elementales necesidades dietéticas.
"Cinco libras de arroz, diez onzas de frijoles, cinco libras de azúcar
y ocho onzas de sal por persona es la cuota de alimentos que le vendieron a la
gente en Sagua de Tánamo por la libreta de racionamiento. Con ella tendrán
que arreglárselas todo el mes de agosto", reveló un residente
de esta localidad.
Por otra parte, se confirmó la venta de cinco onzas de pescado per cápita.
"Es una falta de respeto vender cinco onzas de pescado a los habitantes
de este municipio, cuando Cuba está rodeada de mares en los que abundan
cientos de especies que pueden servir de alimento al hombre. La cantidad que me
tocó la envolví en un pedacito de nylon y me la eché en uno
de los bolsillos del pantalón", declaró Raúl Torres,
un residente de Sagua de Tánamo, quien agregó: "¿También
los peces de nuestro territorio fueron bloqueados por el gobierno de Estados
Unidos de América?"
La escasez de productos agrícolas y el alto precio de los que se
expenden en los mercados contribuyen a que la crisis sea mayor, pues en estos
comercios es donde hay que comprar la mayoría de los alimentos que
consumen los cubanos.
Sin embargo, en los establecimientos dolarizados se venden huevos, carne de
pollo, de res, embutidos de diferentes tipos, productos lácteos, arroz,
granos, aceites comestibles, entre otros productos que la población no
puede adquirir en pesos por la libreta de racionamiento.
Respecto al combustible para que operen las cocinas (la mayoría de
ellas de keroseno), la escasez es tal que las personas van de un sitio a otro
del municipio en busca de un poco de alcohol, de leña, de keroseno, de
cualquier cosa con qué cocinar los alimentos.
"Es como un hormiguero. Primero la gente circula por las calles de aquí
para allá y de allá para acá en busca de algún
alimento. Luego la ves nuevamente, con botellas u otras vasijas en las manos,
buscando algún combustible para cocinar", apuntó una mujer.
Para que se tenga una idea de la crisis: en siete meses se le ha vendido
siete botellas (de 750 mililitros) de keroseno por persona a los habitantes de
Sagua de Tánamo, cantidad que algunos analistas consideran que sólo
alcanza para una semana.
Esta información ha sido transmitida por teléfono,
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