Publicado el 8 de febrero de 2001, en
El Nuevo Herald
Airada la retórica entre Buenos Aires y La Habana
Pablo Alfonso. El Nuevo Herald
La crisis diplomática entre Argentina y Cuba alcanzó el miércoles
proporciones de sainete cuando el embajador castrista en Buenos Aires, Alejandro
González, acusó al canciller argentino, Adalberto Rodríguez
Giavarini, de ser el artífice de "una nueva traición al
pueblo cubano''.
'Cuba no puede ser sacrificada en el altar de las limosnas que da Estados
Unidos'', declaró González al informar que su gobierno había
rechazado por 'inaceptable'' y por contener "amenazas'' la nota de protesta
de Argentina en respuesta a las polémicas declaraciones del gobernante
Fidel Castro.
El diplomático cubano convocó a una conferencia de prensa para
ratificar las declaraciones de Castro, que la cancillería argentina ha
calificado, entre otras cosas, de "irracionales''.
"No hay nada que desmentir, ni justificar'', subrayó González
con un lenguaje airado y muy poco diplomático.
Por su parte el Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina devolvió
el miércoles "por agraviante e injuriosa'', la nota de respuesta de
La Habana a la protesta formal presentada la víspera por Argentina.
Las primeras versiones de prensa sobre las fuertes palabras de Castro
pronunciadas el pasado sábado contra Argentina daban cuenta de
expresiones poco diplomáticas, pero la publicación integra del
texto divulgada por la prensa oficial cubana, fue mucho peor.
La prensa Argentina dedicó amplios espacio el miércoles a
comentar la crisis y se hizo eco de la airada reacción de importantes
sectores políticos de esa nación.
"Castro fue mucho más lapidario con la Argentina que lo que las
primeras noticias informaban'', señaló un extenso reportaje del
diario bonaerense La Nación.
Según el texto oficial cubano, Castro no sólo acusó al
gobierno de Fernando De la Rúa de "lamer la bota yanqui'' sino que
sugirió convertir el Obelisco en una bandera norteamericana.
"Hay que cuadrarlo frente al imperio y poner una banderita de las
barras y las estrellas'', subrayó Castro refiriéndose al Obelisco."¡Si
ya no pueden haber ultrajado más la memoria de los fundadores!", añadió.
Hace poco más de un año Castro profirió acusaciones
semejantes contra México cuando dijo que tras el acuerdo comercial con
Estados Unidos los niños mexicanos conocían mejor a Mickey Mouse
que a sus héroes nacionales.
El canciller Rodríguez Giavarini, de visita en Nueva York, dijo que
las declaraciones de Castro son "un insulto al pueblo argentino''.
'Nosotros en la cancillería argentina estamos analizando con toda
objetividad la situación'', señaló el ministro al término
de un almuerzo organizado por el Consejo de las Américas."Creemos
que esto ha sido un insulto al pueblo argentino, al gobierno, a la administración
también, pero fundamentalmente, lo importante, al pueblo argentino'',
subrayó.
México considera una resolución contra Cuba
Condenaría en Ginebra la situación de los derechos humanos
en la isla
Pablo Alfonso. El Nuevo Herald
El gobierno de México estudia la posibilidad de presentar este año
en Ginebra una resolución que condena la situación de los derechos
humanos en Cuba, en una movida que daría un vuelco radical a la
tradicional política del país azteca hacia el régimen de
Fidel Castro.
"Por ahora la cancillería mexicana está haciendo
consultas con otros países latinoamericanos sin que se haya tomado una
decisión definitiva'', dijo a El Nuevo Herald una fuente vinculada a esa
gestiones, que pidió el anonimato.
La iniciativa mexicana que, según la fuente, fue "comunicada
delicadamente a La Habana'' causó una airada reacción de Castro,
quien inmediatamente la emprendió contra Argentina, país que junto
a Chile, y otros países latinoamericanos analizan la propuesta mexicana.
La cancillería de México, según la fuente, intenta
lograr un consenso en la región con una resolución que tenga un
lenguaje moderado. La propuesta exhortaría al gobierno cubano a un mayor
respeto de los derechos humanos, al tiempo que reclamaría la eliminación
de sanciones económicas estadounidenses a Cuba.
En un aparente intento por "jugar limpio'' con Castro, el canciller
mexicano Jorge Castañeda, envió la pasada semana a La Habana a la
embajadora Marie Claire Acosta, para explicarle a los cubanos la posición
de México y buscar una fórmula de compromiso. La diplomática
está encargada de Derechos Humanos y Democracia de la Secretaría
de Relaciones Exteriores y ha sido nombrada, además, jefa de la delegación
de México en Ginebra.
"La reacción en Cuba fue muy negativa'', subrayó la
fuente.
La iniciativa alentada por el presidente Vicente Fox intenta recuperar el
liderazgo de México en la región, al tiempo que manda un claro
mensaje sobre la nueva política exterior de ese país, según
los analistas.
"No es sorprendente del todo esa iniciativa teniendo en cuenta el papel
que México puede jugar en la región'', afirmó Damián
Fernández, Director del Departamento de Relaciones Internacionales de la
Universidad Internacional de la Florida. "Tampoco sorprende la reacción
de Castro, porque ese liderazgo de México en reclamar respeto a los
derechos humanos en Cuba es nefasto para su régimen'', añadió.
Durante su reciente visita a Washington, el canciller Castañeda
anunció que México podía cambiar su tradicional abstención
en Ginebra y acompañar este año a Argentina y otros países
de América Latina en una condena contra la violación de los
derechos humanos en Cuba.
La movida mexicana no ha sido enfrentada directamente por La Habana, la cual
ha dirigido toda su ofensiva contra Argentina, que presidirá este año
las sesiones de la Comisión de Derechos Humanos en Ginebra.
"Castro está preocupado porque la condena en Ginebra supone un
nuevo respaldo internacional a la creciente oposición interna'', afirmó
Ernesto Betancour, especialista en asuntos cubanos. "Hace algunos años
ese voto no le importaba mucho, pero ahora realmente le teme'', dijo.
Se marcha un reportero atacado por Castro
Pascal Fletcher es corresponsal en La Habana del Financial Times y
colaborador de Reuters
Wilfredo Cancio Isla. El Nuevo Herald
Apenas un mes después de que el gobernante Fidel Castro amenazara a
las agencias internacionales que desde La Habana "transmiten insultos y
mentiras contra la revolución'', el periodista británico Pascal
Fletcher está haciendo las maletas para abandonar Cuba junto a su
familia.
Aunque no se ha producido aún una comunicación oficial,
Fletcher, de 41 años, confirmó ayer su salida de Cuba "en
unas semanas''.
"Sí, no voy a negar que esos son mis planes inmediatos'', afirmó
ayer Fletcher, corresponsal en La Habana del diario Financial Times y
colaborador de la agencia Reuters.
Sin embargo, el periodista declinó ofrecer detalles a El Nuevo Herald
sobre la decisión de abandonar la isla o si se trata de una medida
aplicada por sus empleadores.
Angus McSwan, jefe del buró regional de Reuters para el Caribe,
declaró ayer en Miami que no podía confirmar "ninguna
información sobre los corresponsales en La Habana''.
Pero una fuente dentro de la isla aseguró que los preparativos de la
partida de Fletcher están vinculados a los ataques lanzados por los
medios oficiales y el propio Castro contra su gestión periodística.
"Lamento que Pascal [Fletcher] tenga que tomar este camino a raíz
de la campaña desatada por el gobierno contra la prensa extranjera'',
expresó un corresponsal extranjero que habló bajo condición
de anonimato. "Y lo lamento especialmente porque él desearía
permanecer aquí en este país con su familia cubana''.
Fletcher permaneció en Cuba como corresponsal de Reuters entre 1989 y
1993. Luego de un año de ausencia, regresó a la isla en 1994 en
representación del Financial Times, y se mantuvo además como
colaborador de la agencia británica.
Vive actualmente en La Habana con su esposa cubana y dos hijos, de 18 y
siete años.
"Fletcher es sin dudas el periodista que mejor conoce hoy por hoy la
economía cubana'', afirmó en Miami el periodista Jorge Ebro, que
laboró en el semanario Opciones y abandonó la isla a finales del
pasado año. "Es un hombre que adora al pueblo cubano y que se
comportó siempre con un gran profesionalismo y espíritu de
cooperación entre colegas''.
La repentina partida de Fletcher se produce luego de que a comienzos de este
año los medios gubernamentales atacaran su desempeño profesional,
acusándolo de "intrigante y ponzoñero habitual contra la
revolución cubana'' y de mantener "permanente y estrecha relación
y coordinación con la Oficina de Intereses de los Estados Unidos''.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) respaldó de inmediato al
corresponsal británico y calificó el hecho como "una situación
permanente y cotidiana en un régimen totalitario''.
Poco después de las críticas lanzadas por el diario oficial
Granma y las llamadas mesas redondas televisivas, Castro amenazó a las
agencias de prensa que transmiten "informaciones tendenciosas'' sobre la
realidad cubana.
Aumentan la seguridad en el juicio a los espías
Rodrigo Alonso. El Nuevo Herald
Debido a una protesta de cubanos exiliados del grupo Vigilia Mambisa se
incrementó ayer la vigilancia policial frente a la Corte Federal de
Miami, donde se sigue el juicio a cinco cubanos acusados de espiar para Cuba.
Después del primer receso, a las 10:45 a.m., el abogado defensor Paul
A. McKenna solicitó la suspensión del juicio por el día,
aduciendo que el jurado podría verse influenciado en su veredicto por los
manifestantes. Sin embargo, el juicio se reanudó unos 45 minutos más
tarde luego de que la jueza Joan A. Lenard convocara a fiscales y defensores
para consultas privadas.
Tres de los cinco abogados defensores, McKenna, Bill Norris y Joaquín
Méndez, interrogaron durante toda la mañana de ayer a Leonel Morejón
Almagro, líder del grupo opositor Concilio Cubano, e intentaron una y
otra vez relacionar a esa organización con grupos de exiliados que
provocan al régimen de Fidel Castro.
McKenna preguntó a Morejón sobre sus contactos con Radio Martí,
Hermanos al Rescate y otros grupos anticastristas del exilio.
Morejón respondió que Radio Martí era una emisora donde
el pueblo cubano puede escuchar ciertas verdades, pero que es difícil
escucharla por estar interferida por el gobierno de la isla. También señaló
que en múltiples ocasiones usó los micrófonos de la
emisora.
Señaló que el Concilio Cubano intentaba convocar a todo el
pueblo cubano. "Yo diría que si Alpha 66 [grupo partidario de la
lucha armada contra el castrismo] hubiera querido participar en Concilio Cubano
y aceptar caminos de paz, lo hubiéramos aceptado'', agregó. La
defensa intentó que Morejón aceptara que la convocatoria era
incluso para grupos o personas que han cometido delitos violentos, a lo que
Morejón contestó: "El que ha cometido crímenes en Cuba
es el gobierno, pero si se quiere reconciliación hay que perdonar a todo
el mundo''.
En varias ocasiones la jueza dio instrucciones a Morejón para que se
limitara a contestar lo que preguntaba la defensa.
Cuando McKenna trató de mostrar que Hermanos al Rescate había
violado las leyes cubanas , Morejón respondió: "El caso
cubano es único, [los ciudadanos de la isla] necesitan pasaporte y
permiso para ingresar a su propio país, y muchas veces, ese permiso es
negado''.
La jueza Lenard declaró que a partir del 16 de febrero el juicio a
los presuntos espías empezaría una hora más tarde, a las 10
a.m.
Castro irá a Teherán
Efe. La Habana
El gobernante cubano Fidel Castro viajará a Irán este año,
según el embajador de Irán en la isla, Seyed D. Mohseni Salehi.
El diplomático precisó a la prensa que el viaje del gobernante
había sido pospuesto en el 2000 y anunció que una delegación
de parlamentarios iraníes participará en la 105ta. reunión
de la Unión Interparlamentaria que se celebrará en abril en La
Habana.
El gobierno iraní ha concedido a Cuba un crédito de $10
millones para la compra de textiles y otros productos, dijo el embajador.
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