Interrogantes ante la marcha de la cosecha tabacalera
PINAR DEL RIO, 7 de enero (Víctor Rolando Arroyo, UPECI) - Según fuentes oficiales, la siembra de tabaco cerró el año 1999 con 29,859 hectáreas plantadas, lo que representó el 93% de lo total programado a sembrar en la presente cosecha en la provincia
pinareña.
Mirando desde ese ángulo, todo aparenta marchar de forma ordenada, lo que no concuerda con los criterios de los especialistas independientes.
La intención oficial era adelantar lo más posible la fecha de siembra, buscando escalonarlas en evitación de las frecuentes afectaciones que ocurren en los meses de noviembre, diciembre y enero. En el mes de septiembre lo plantado fue poco y hubo pérdidas diversas por
los efectos del huracán Irene, que amenazó a mediados de octubre, mes que cerró con apenas un 5% del área sembrada. En noviembre y diciembre, el ritmo de siembra promedió 461 hectáreas por día, algo que no pocos ponen en duda.
Ahora surgen más interrogantes. ¿Se dispondrá del imprescindible número de trabajadores agrícolas para atender adecuadamente estas plantaciones? ¿Existirán las capacidades de curación de la hoja que eviten las pérdidas por abatorramiento
al producirse cuellos de botella en la cosecha?
Diciembre se presentó extremadamente seco, lo que ha reclamado de un esfuerzo adicional en la aplicación del riego. Hay carencia de equipos de bombeo y no abunda el combustible. La falta de humedad conspira en la calidad y rendimientos de la hoja, talón de Aquiles en este
cultivo.
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