El Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL), nominó al Comité de Ciudadanos por la Integración Racial de Cuba, para el Premio anual de la Fundación Hrant Dink, 2013. Este premio homenajea a individuos, organizaciones y grupos que trabajan por un mundo libre y justo, sin discriminación, racismo, ni violencia, y que se arriesgan para alcanzar esos ideales, rompiendo con los estereotipos y utilizando un lenguaje de paz.
Para conocer detalles en torno a la nominación, con que fue distinguida este año la prestigiosa organización de nuestra sociedad civil alternativa, Cubanet entrevista a Juan Antonio Madrazo Luna, coordinador nacional.
Esta conversación se sostuvo en Cuba, poco antes de que Madrazo Luna y otros activistas partieran hacia Estados Unidos, donde se encuentran en estos momentos, para participar en una serie de eventos en Pittsburg y otras ciudades norteamericanas.
Cubanet: ¿Por qué CADAL nomina al Comité de Ciudadanos por la Integración Racial de Cuba?
J.A.M: Fuimos nominados el pasado año por CADAL para el Premio Internacional Rey Juan Carlos de Derechos Humanos, que al final lo obtuvo una ONG mexicana. Es la segunda ocasión que CADAL nomina al Comité. El solo hecho de ser nominados es un gran elogio, un premio para el Comité, para la sociedad civil, que es nuestro punto de partida: la lucha contra el racismo, contra cualquier tipo de discriminación, sea por sexo, género, opinión, raza. La propuesta es un reconocimiento a la lucha del movimiento afro-descendiente en la Isla, a la sociedad civil para que la problemática racial sea visualizada.
Cubanet: ¿Qué acciones desarrolla actualmente el Comité que usted preside?
J.A.M: Somos una plataforma de comunicación y amplificamos la señal. Nos movemos en todos los escenarios posibles, no solo de la sociedad civil sino también en espacios institucionales, fiscalizados por el gobierno. Hacemos política desde la ciudadanía. El ente fundamental es el ciudadano, para el que trabajamos. Durante los últimos tres años, el Comité ha llevado una cruzada al interior de las comunidades. El gobierno no tiene voluntad política para ampliar el tema en la agenda pública. Llevamos la delantera. Manifiesta que hablar del tema racial públicamente es debilitar y amenazar la unidad nacional.
Creemos que si el tema racial no se discute en público, pudiera ser un peligroso combustible en el futuro. El objetivo principal del Comité es movilizar y trabajar con plataformas como la Red de Bibliotecas Cívicas Reinaldo Bragado Bretaña y el programa Animando Sonrisas, que empodera a la comunidad (marginal) infantil y juvenil. También con la plataforma Observatorio Ciudadano contra la Discriminación, relacionado con la documentación de violaciones y discriminaciones de todo tipo. Nos ocupamos además con la cultura alternativa urbana. Tenemos conexión con jóvenes que se mueven en las esferas del rap, hip hop, implicados en denuncias sociales y contra la violencia. Ahí entramos en el tema y el propósito de Violencia Cero.
Cubanet: ¿Puede precisar sus actividades en barrios marginales?
J.A.M: Hemos realizado algunas, apoyados por otras plataformas, como la mencionada Red de Bibliotecas en Animando Sonrisas, dirigida hacia niños muy afectados por la violencia en el seno familiar, hasta en cuarta y quinta generaciones. Desarrollamos nuevos juegos, les entregamos juguetes. Usamos a veces disfraces. El Comité está muy vinculado y apoya Acetato Producciones, muy relacionado con el escenario cultural alternativo musical de Omni Zona Franca.
Hay apoyo hacia nosotros y de nosotros hacia ellos. Son artistas emergentes, independientes, apartados por el régimen, que se mueven en el mundo de la Nueva Trova, del rap, del hip hop. Recientemente ayudamos con el último disco de Silvito el Libre (hijo del cantautor cubano Silvio Rodríguez). Auspiciamos conciertos de Escuadrón Patriota, de Bárbaro Urbano Vargas. Todos de la generación más joven del hip hop. A fines de año tendremos la cuarta edición del evento académico Raza y Cubanidad. Siempre desde la sociedad civil. Añado que, junto al Observatorio Ciudadano contra la Discriminación, documentamos todo tipo de violencia desde la familiar hasta la de carácter político.
Cubanet: ¿El Salón de Negros Ilustres de Cuba también se encuentra entre sus objetivos?
J.A.M: Fue el primer salón de ese tipo en el continente americano. Pretende reafirmar la autoestima del afro-descendiente cubano, que es aún muy débil, apenas se ven representados. Queremos que se sientan representados como parte de la nación. Son personalidades destacadas a lo largo de la República (1902) y hasta el presente, en los campos de la política, cultura, ciencias, deportes.
Cubanet: Sabemos que usted, junto a otros distinguidos activistas cubanos del antirracismo, viajarán próximamente a los Estados Unidos, ¿cuál es su proyecto para este viaje?
J.A.M: Es una experiencia inédita para los tres: Manuel Cuesta Morúa, Leonardo Calvo Cárdenas y para mí, que viajaremos juntos a Estados Unidos; Cuesta estuvo en Miami años atrás. Estaremos una semana en la Universidad de Pittsburg, en un programa cultural con participación de varias instituciones norteamericanas. Queremos dar las gracias a todos. En primer lugar a Afro Cuban Alliance, que coordina la revista Islas, uno de los proyectos más interesantes del que participamos desde Cuba con nuestros artículos. También a la Carnegie Mellon University; a la Unión Cultural Latinoamericana, de Pittsburg; y al Coro Latinoamericano.
Las actividades comienzan con una exposición fotográfica de mi autoría: Crossing Havana, que retrata el ambiente sociocultural de los afro descendientes en esa Habana profunda que la mayoría de los afro descendientes que vivimos aquí desconocíamos. Para mí, fue un descubrimiento, porque viviendo en el barrio de El Vedado, desconocía que existen otras Habanas en mi entorno. Habrá un conversatorio, en el que participaremos cubanos y estadounidenses, en relación con lazos y puentes entre las culturas cubana y afroamericana. Habrá conversatorios formales e informales, mesas redondas, encuentros con auditorios de Pittsburg, paseos, invitaciones de otras instituciones culturales y académicas. Después, estaremos en la Universidad de Las Vegas.
Gran parte del tiempo estaremos en Miami. Contactaremos con algunas plataformas culturales, sociales y políticas de Florida. Pienso que son muy importantes los contactos con gran parte del exilio cubano. A Washington irán Cuesta y Calvo como ponentes en el Congreso de la Asociación de Estudios Latinoamericanos (LASA). Una preocupación nuestra es lograr comunicación horizontal con la comunidad afro-norteamericana. Durante muchos años, el gobierno cubano ha manipulado gran parte de esa comunidad en cuanto a la problemática racial, como se desprende de la importancia que tiene recientemente la polémica alrededor del Caso Roberto Zumbano, que no es el primer caso, porque siempre ha habido linchamientos políticos.