LA HABANA, Cuba, julio, 173.203.82.38 – De acuerdo a lo informado oficialmente, Raúl Castro salió de La Habana el domingo primero de julio y llegó a Pekín el miércoles 4, en un extraño vuelo que aparentemente duró tres días. Aunque el General de Ejército y jefe del Partido Comunista y de los Consejos de Estado y de Ministros, concluyó sus visitas a China y Vietnam y ahora se encuentra en Rusia, los dos días “perdidos” en el vuelo hacia el llamado gigante asiático continúan generando rumores, opiniones y hasta chistes entre la ciudadanía. A continuación, copio algunos comentarios representativos de lo que se escucha en la calle.
“¿Tres días? Como si estuvo 15. Da igual, eso a nadie le importa. Si se queda 15 años por ahí sería buenísimo.”
“Seguro que estuvo en Camp David descansando y conversando con Obama.”
“Lo atrapó el Triángulo de las Bermudas. Pero, ¡mira que mala suerte la nuestra que pudo salir!”
“Esos dos días los pasó en Paraguay tratando de convencer a Lugo para que viniera a vivir para acá. Pero el cura le contestó que aunque él había pecado, Dios no lo había condenado todavía al infierno.”
“Lo secuestraron los extraterrestres, pero cuando le examinaron el cerebro decidieron devolverlo. A ver, ¿qué le hemos hecho nosotros a los extraterrestres para que nos hagan esa basura.”
Quizá, como dijo la persona – una señora de más de 55 años- que dio la primera de las cinco opiniones que cito, a los cubanos no les interese a donde va el General Castro, ni el tiempo que duren sus extraños vuelos, pero el punto es que él se presenta como representante del pueblo cubano, que además es quien paga sus gastos y los de toda la comitiva, y resulta elemental que sepamos qué anda haciendo o dónde se ha metido.
¿Y qué han dicho los medios en la isla sobre esos dos misteriosos días no explicados en el calendario oficial, que se han convertido en una incógnita? Nada, absolutamente nada. Pero eso – aunque patético – no es extraño, porque todos sabemos que los medios oficiales no están para informar, sino para decir lo que les ordenen que digan.
No obstante, se supone que el General, como un gesto de “gentileza” hacia su pueblo, nos diga donde estuvieron él y sus acompañantes antes de llegar a China.
De todas formas, si nada dice, eso tampoco sería raro y no sería la primera vez. Él y su hermano mayor han tomado decisiones de importancia vital para el país y el Planeta, y el pueblo de Cuba se ha enterrado -de las que no hemos enterado- cuando los hechos ya se han consumado.
Por ejemplo: entregarse al comunismo internacional e instalar en el territorio nacional armas atómicas soviéticas. Acción que como todo el mundo sabe, puso al planeta al borde de un holocausto nuclear.