CARACAS, Venezuela, 2 de agosto (Agencias, 173.203.82.38) – Venezuela tildó el jueves de “infame”, “calumnioso” e “injerencista” el informe que presentó esta semana el gobierno de Estados Unidos donde se refiere a la “poca colaboración” de Caracas en la lucha antiterrorista., dijo la agencia Efe.
En un comunicado de la Cancillería venezolana, el gobierno de Hugo Chávez rechazó “de la manera más firme y categórica el falaz y calumnioso” informe sobre terrorismo anual publicado por el Departamento de Estado norteamericano el pasado día 31, al tiempo que acusó a Washington de proteger “a reconocidos terroristas internacionales”.
Por sexto año consecutivo Estados Unidos culpó a Venezuela por no “cooperar completamente” en la lucha antiterrorista y subrayó sus vínculos con Irán, con la banda terrorista vasca ETA y con las guerrillas colombianas de las FARC y el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Venezuela “ha mantenido su cooperación económica, financiera y diplomática con Irán, así como limitados acuerdos militares”, apuntó el informe, que mencionó las sanciones a la estatal petrolera PDVSA por el comercio con Teherán y las sanciones económicas estadounidense a funcionarios de alto rango de Caracas acusados de dar apoyo a las FARC.
“El gobierno de los Estados Unidos, una vez más, presenta estos informes unilaterales e injerencistas en los cuales expresan una opinión tendenciosa y distorsionada sobre las políticas de otros países en un tema como el terrorismo donde, además, ese país no tiene moral ninguna para pronunciarse”, continúa el texto de la Cancillería.
Al denunciar la “doble moral” de Estados Unidos y su “hipócrita política antiterrorista”, el gobierno venezolano recuerda que su país ha denunciado en repetidas ocasiones ante las Naciones Unidas a Estados Unidos de “dar abrigo y protección a reconocidos terroristas internacionales”.
Cita, por ejemplo, el caso de Luis Posada Carriles, cubano de nacimiento y nacionalizado venezolano, a quien Venezuela y Cuba acusan de varios atentados terroristas, entre ellos la voladura de un avión de Cubana de Aviación en 1976 con 73 personas a bordo.
“Es lamentable para aquellos países que estamos verdaderamente comprometidos con la lucha antiterrorista (…), que países como EE.UU. mantengan la práctica de informes que no tienen ninguna validez pues se componen de información no verificada y, por lo tanto, son obviamente instrumentos políticos para la difamación”, señala el comunicado, según Efe.