MIAMI, Florida, 11 de junio (Agencias, 173.203.82.38) – La Arquidiócesis de Miami informó el lunes que monseñor Agustín Román, quien falleció en abril a los 83 años, designó 60,000 dólares para la Diócesis de Matanzas, donde inició su trabajo pastoral, reportó El Nuevo Herald.
El diario informó que el monto ya fue enviado al obispo de la diócesis cubana, monseñor Manuel de Céspedes.
“Román siempre mantuvo un gran amor por Cuba y, en especial, por la provincia de Matanzas”, declaró el arzobispo de Miami, Thomas Wenski, en un comunicado. Wenski es el ejecutor del testamento de Román.
Según personas cercanas a Román, éste también dejó parte de su herencia a su principal obra, la Ermita de la Caridad de Miami, aunque el anuncio de la arquidiócesis no hace alusión a esta donación, dijo El Herald.
Román inició su educación religiosa en el Seminario San Alberto Magno de la Diócesis de Matanzas, en la ciudad de Colón, pero terminó sus estudios en el Seminario de Misiones Extranjeras en Montreal, donde vivió cuatro años.
El 5 de julio de 1959 fue ordenado sacerdote por el obispo de Matanzas, Monseñor Alberto Martín Villaverde en la parroquia de San José de Colón. Fue ungido como vicario de las comunidades de Coliseo y Lagunillas.
El único sueño de Román era ser sacerdote en la Diócesis de Matanzas, dijo El Herald, pero ese sueño se marchitó el 17 de septiembre de 1961, cuando, en un esfuerzo por extinguir el catolicismo en la isla, fue expulsado por el régimen castrista rumbo a España en un barco junto a 130 sacerdotes y monjas.
En una entrevista con El Nuevo Herald, Román recordó el día de enero de 1979 cuando supo que Juan Pablo II lo había nombrado obispo auxiliar de la. Ese día también se convirtió en el primer obispo cubano de la Iglesia Católica en Estados Unidos y uno de los 10 primeros hispanos
“¿Qué me importaba a mí ser obispo? Mi ideal era trabajar en Cuba en mi Diócesis de Matanzas”, dijo Román.