LA HABANA, Cuba. -Se espera que el popular restaurante El Jardín, ubicado en la calle Línea, del capitalino barrio del Vedado, reabra totalmente sus puertas al público a partir del próximo mes de junio del 2015.
Desde fuera, se percibe que el nuevo concepto de este emblemático lugar dista mucho de ser lo que fue antaño, cuando brindaba un servicio asequible al bolsillo de la mayoría de los ciudadanos.
Según varios vecinos y constructores de la brigada particular que allí labora, los cuales prefirieron el anonimato, las inversiones hechas hasta el momento, que incluyen equipos importados desde Panamá, corren a cargo de un cubano-venezolano, llamado Remy, del que aseguran también posee una paladar en la calle 26, próxima al zoológico de la Habana, y de otros financistas asociados.
Actualmente en un extremo del recinto en remodelación, equipado con neveras, hornos eléctricos, y otros útiles de cocina, se brinda el servicio de cafetería. Sin embargo, los precios son exorbitantes, esto avanza lo que costará sentarse a comer en el restaurante, o ir a disfrutar de la nueva discoteca que también planean abrir, una vez que los trabajos terminen.
Para tener una idea sobre este futuro, estos son algunos ejemplos de la lista de precios (en pesos) de la mencionada cafetería: Cerveza importada, $40.00; hamburguesa, $60.00; pollo rostizado, $150.00. El salario promedio en Cuba es de 470.00 pesos mensuales.
Resulta evidente que un trabajador medio jamás podrá darse el lujo de visitar el nuevo Jardín, a diferencia de lo que fue aquel vistoso centro, cuando antes y después del año 59, hasta el periodo especial, formó parte de la cadena de restaurantes que distinguieron a la capital habanera. Uno de los símbolos culinarios del Vedado, exhibía una amplia gama de servicios, dirigida a todos los gustos y bolsillos.
Vicente, un residente cercano al Jardín que sobrevive de la recogida diaria de materia prima, al preguntarle sobre cuáles beneficios traería al barrio la apertura del restaurante con sus nuevas ofertas y precios, declaró: “Creo que aquel cubano que vive de su salario, y esos son la mayoría, nunca podrá visitar ese lugar.”
Cubanet conversó con uno de los inquilinos de los cinco apartamentos ubicados en la planta alta del restaurante, el cual prefirió no dar su nombre, para conocer si ellos se habían beneficiado de la remodelación del inmueble. “En cuanto a los arreglos en cada apartamento, cuyas paredes ya están con rajaduras, por tantos años de deterioro, yo esperaba algo más eficaz y sustancioso a lo realizado por esta brigada. Sólo se ocuparon de arreglar las posibles filtraciones de agua en los baños, y le dieron una pasadita de pintura por fuera.”
Uno de los trabajadores encargados del acondicionamiento de El Jardín, que no quiso identificarse, afirmó: “Aquí Don Remy, el cubano-venezolano, nos paga entre ciento cincuenta y doscientos dólares mensuales, aparte de otros estímulos. Estamos todos muy contentos.”
El Jardín nunca fue entregado a la estatal Empresa de Restaurantes de Lujo, tal como se había anunciado por algunas fuentes en el 2013. Por el contrario, éste (como otros tantos locales) ha sido cedido a “inversores privados”. Toca esperara la reinauguración.